Nunca en la historia Colo Colo había recibido 10 goles en seis días. Pocas veces se había visto una defensa tan blanda, tan lenta y tan descolocada. En definitiva, hace mucho tiempo que no se veía un equipo tan mal en la cancha.

En el papel, la formación de Colo Colo parecía lógica, al igual que la planificación que había hecho el técnico Pérez, pero ninguna planificación aguanta tantos errores, como los que presentó el “Popular” en el arranque.

El partido no pudo empezar peor, al minuto, pelotazo a la espalda de la defensa alba, Scotti “corre” -o hace el intento de correr- choca con Castillo, el balón le queda a Nanni y este abre la cuenta. Baldazo de agua fría.

Los fantasmas del sábado se vinieron a la cabeza y aparecieron más que nunca a los seis minutos cuando encaran a Magalhaes, achica Castillo, viene el centro y en el punto penal, sin marca alguna aparece Dos Santos para poner el 2-0 para el local. Para no creer.

Seis minutos más tarde, en la primera que tuvo Colo Colo embocó, Medel por izquierda saca el centro, tras una serie de rebotes, le queda a Jorquera, Cristóbal la acomoda para la derecha y de sobre pique se despachó un golazo para el descuento y la esperanza.

Los problemas defensivos continuaron, a los 26´ Magalahes comete una infracción en el borde del área, el árbitro la cobró afuera y cuatro minutos más tarde, Scotti se gana amarilla, tiro libre y Castillo se luce sacándola sobre la línea.

Tras eso, vino lo mejor de Colo Colo en el primer tiempo, primero arranca Miralles, cae en el área, nada dijo el árbitro, luego Paredes cabecea tras centro de Jorquera, y a los 40` Paredes mal de cabeza tras centro de Magalhaes, el rebote le queda a Medel que encara y patea desviado.

La última del primer tiempo fue para Colo Colo: Paredes tira una pared con Jorquera, encara, se saca al arquero, se quedó sin ángulo y tira afuera cuando entraba solo Miralles. A las duchas con la esperanza del repunte.

En el segundo tiempo no hubo ni tiempo para la ilusión, al minuto, el recién ingresado Iturbe, le gana a Magalhaes, tira una pared con Fabbro, Iturbe encara, Toro no llega y define suave a un costado de Castillo. Un mazazo.

Después de eso, Colo Colo se vio mal, comenzaron a correr detrás de la pelota, Ormeño se vio desacomodado, Millar ni arriba ni abajo, Medel cuando la tuvo jugó con criterio y Jorquera huérfano cada vez que le llegó trató de jugarla de manera criteriosa.

De una seguidilla de toques vino un pase notable de Medel para Magalhaes que achica el portero y en la contra, Castillo comete penal y Nanni decreta el 4-1.

Luego Colo Colo tuvo un par en los pies de Jorquera y Paredes, precisamente, tras un pase de Miralles, el propio “Visogol” marcó el descuentom pero los errores en el fondo no pararon.

Diez minutos más tarde, Iturbe se saca muy fácil a Magalhaes, entra solo y decreta el marcador final y el título de boleta.

En resumen, en defensa, Magalhaes nunca se acomodó, no ganó un solo mano a mano, Andrés Scotti debería seguir el camino de su compañero Alayes y quedarse afuera tomando mate, porque adentro no rinde y tiene una lentitud que asusta, Toro trata de salvar la situación, pero la impotencia lo hace cometer errores al correr desesperado de lado a lado y Salcedo, definitivamente rinde mas en el medio.

Ormeño no se acomodó nunca de volante central, dejando un forado que siempre fue aprovechado por los locales, Millar no fue ni la sombra del mejor jugador chileno en el torneo pasado, Medel cuando la tuvo mostró sus cosas, Jorquera, lo mismo, las opciones claras, salieron de sus zapatos y arriba, Paredes luchó, guerreó y convirtió y Miralles muy poco, poquísimo para lo que se espera del.

Un marcador que duele, sobre todo porque “una vez muerto el perro”, no se ha acabado la rabia… ni los errores.