Durante la semana, Jorge Valdivia confesó que estaba complicado para llegar al partido de Colo Colo ante Huachipato. Si bien ya está recuperado de su desgarro, aún le faltaba en lo futbolístico y en lo físico.

Finalmente, su temor se hizo realidad: pese a las ganas que tenía Héctor Tapia prefirió dejarlo en Santiago para no arriesgarlo a una nueva lesión.

El Mago viene trabajando en doble turno en el Monumental para estar a punto para la última fecha, que se jugará en Pedrero (con gente) ante la U. de Conce en fecha a definir del fin de semana subsiguiente.

La dolencia la arrastra del partido con Bolívar en Santiago, donde se desgarró en un muslo y el cuerpo médico prefirió romper la herida completa para que le cicatrizara de cero. Ha venido trabajando con un equipo multidisciplinario para que no le moleste más.