Colo Colo y O’Higgins no se sacaron ventaja y empataron 1-1 en el Estadio Municipal de San Fernando, en un pobre partido marcado por los goles de Javier Correa y Maximiliano Romero, y las expulsiones de Salomón Rodríguez en la visita y de Alan Robledo en el local.
Y aunque el duelo se jugó solo con público local, terminó con hechos violentos que pudo constatar DaleAlbo en el recinto deportivo. El principal fue el lanzamiento de una botella desde la tribuna a Aníbal Mosa, cuando el presidente de Blanco y Negro salía del estadio con dirección a la zona de camarines.
Mientras caminaba, y por suerte ni él ni nadie recibió el proyectil, el dirigente fue interceptado por una persona con un micrófono, aparentemente un periodista. Como Mosa no le contestaba, los encargados de seguridad del timonel albo lo intentaron apartar, desatando la molestia del comunicador.
En este tumulto llegaron guardias del estadio, y quien increpaba a Mosa tropezó solo y cayó al suelo, acusando muchas muestras de dolor como si fuese agredido por la delegación alba, lo que no ocurrió según observó nuestro medio en el lugar. Por suerte, nada pasó a mayores tras toda esta situación.
Aníbal Mosa se refirió a esta situación en San Fernando
Minutos después de lo sucedido, el propio Aníbal Mosa conversó con los medios en un punto de prensa y explicó la situación: “Iba saliendo, dirigiéndome a los camarines, y de repente vi que empezaron a caer cosas de la galería. Se acercó un reportero a hacerme unas preguntas y de repente vi que terminó en el suelo, no sé si se resbaló o alguien lo empujó. Pedí que me mostraran las imágenes, al parecer él se resbala o se tropieza con alguien, y lo importante es que no tiene ningún problema físico ni de salud que es lo más importante”.
Los otros incidentes en la cancha del Municipal de San Fernando
Lo que pasó fuera del Estadio Municipal de San Fernando no fue el único incidente en el partido, ya que en la cancha también hubo algunos. En la transmisión de TNT Sports se constataron dos, siendo uno de ellos un tumulto en la zona de camarines, tras la expulsión de Alan Robledo en el local. Según Daniel Arrieta, muchas personas corrieron hacia esa zona para separar a los involucrados.
Y el otro se observó justo después del pitazo final, cuando un fotógrafo de Colo Colo era increpado por hinchas de O’Higgins a través de la reja. Esto solo quedó en palabras de grueso calibre, pero por suerte, al igual de los demás incidentes, no pasaron a mayores.