Apenas sonó el silbato que puso fin al partido donde Colo Colo cayó ante Cobresal, los jugadores se dirigieron rápidamente a camarines, visiblemente molestos por el resultado y haber caído tan cerca del final.

Sin embargo, el paso de los minutos no sirvió para mejorar los ánimos y se fueron en silencio del estadio El Cobre sin dirigirle la palabra a los medios de comunicación presentes.

La molestia surge por la forma en que se cae y también por cortar la buena racha que llevaban en este inicio de temporada, donde venían de derrotar con contundencia a Palestino y levantar la Copa Chile.

Los jugadores de a poco comienzan a retirarse para emprender su retorno a Santiago. El lunes regresan a los entrenamientos pensando en lo que será su partido ante Audax Italiano en La Florida.