Juan Carlos González hizo una buena dupla defensiva con Pedro Reyes en el Colo Colo de Gustavo Benítez que logró llegar a las semifinales de la Copa Libertadores de 1997, donde fueron eliminados por Cruzeiro.

El defensor era apodado el karateca por haber practicado esta arte marcial y en conversación con DaleAlbo reconoció haber aplicado sus conocimientos contra un jugador de Cruzeiro que se burló de ellos tras haberlos dejado fuera de la competición.

 

“Íbamos subiendo por el túnel y el que nos marcó el gol se empezó a burlar de nosotros. Entonces por el carácter de Ivo y mío, que somos de mecha corta, nos hizo botar la reja. Lo agarramos y subimos con puras caricias, lo dejamos botado, ningún compañero suyo fue a defenderlo. Lo dejamos ahí y hasta varios periodistas le pegaron su caricia en el suelo”, recordó.

Tras aquella dolorosa eliminación, los albos volverían a verse las caras con el elenco brasileño en el marco de la extinta Supercopa. Les tocó ir a Belo Horizonte y justo lo llamaron para el control antidoping, donde entendía, lo podrían recibir con hostilidad.

“A la vuelta nos tocó el doping a Ivo y a mí, pero también estaba el personaje que nos hizo el gol. Decíamos con Ivo ‘aquí entramos guapos o nos pega’. Entramos a matar o morir, pero fueron bien agradables la verdad, nos dijeron que pasáramos primero estaban calmados”, agregó.

Finalmente, González cree que tuvieron mala fortuna, ya que siempre encaraban las llaves más difíciles. “Nos tocaron los rivales que salieron campeón, porque en la otra llave estaba más accesible, aunque son supuestos y para ser campeón hay que ganarles a todos, pero también un poco de suerte. Tuvimos poca suerte en los sorteos”, completó.