Colo Colo se enfrentó durante esta tarde a Everton de Viña del Mar en el Estadio Monumental, en una final más para el Cacique en su afán por escapar, aunque sea por algunas horas, de los puestos de descenso en este Campeonato Nacional 2020.

El partido inició de la mejor forma posible para Colo Colo, encontrando rápidamente la alegría del gol ante los viñamarinos. Con 4’ en el reloj Costa inició una buena jugada, habilitando a Valencia, quien sacó un preciso pase por la derecha al pie de Pablo Mouche para que el argentino empujara la pelota al fondo del arco. 1-0 para el Cacique en el Monumental.

Everton intentó responder, pero los albos mostraban una buena seguridad en el fondo, controlando a Juan Cuevas con Jorge Díaz por las bandas y manteniendo a raya los embates de la visita.

Los oro y cielo tuvieron su primera clara con 21’ en el reloj tras un remate desviado de Cristian Menéndez que Cortés logró contener de buena forma. Rápidamente respondió el Cacique con una buena subida de Suazo que terminó en un centro rechazado por Pereira. La visita intentó con un remate elevado de Cristian Menéndez que pasó cerca. De ida y vuelta el encuentro.

Con 26’ casi llegó el 2-0 para el Cacique por medio de un autogol tras el cabezazo a su propio arco de Bastián San Juan. Johnny Herrera se tuvo que exigir para evitar un nuevo tanto albo en el Monumental.

El trámite del partido fue parejo, con Colo Colo controlando bien el balón con Leonardo Valencia, Gabriel Costa y Pablo Mouche como principales agentes de peligro ofensivo, además de las buenas descargas de Iván Morales en el centro del ataque.

Albos y Ruleteros llegaron al entretiempo sin hacerse más daño en el marcador en el césped del Monumental. De esta forma el Cacique cerraba una de las mejores versiones vistas en los últimos encuentros.

ESTE ES EL CAMINO 

El inicio del segundo tiempo trajo a un Everton que salió con todo en búsqueda de la igualdad. Apenas a los 47’ tuvo una clara por medio de Suarez, quien sacó un remate que fue rechazado de forma brillante por Campos, quien estuvo atento para llegar al cruce.

Lamentablemente a los 52’ cayó lesionado Leonardo Valencia, quien hasta ese momento había realizado un muy buen encuentro. El 10 del Cacique debió salir reemplazado por Williams Alarcón, buscando algo de poderío defensivo en el mediocampo albo.

El cambio afectó a Colo Colo, ya que perdió notoriamente la posesión de la pelota al no haber generación de juego en el mediocampo y a la presión alta del equipo de Roberto Sensini. Los albos se defendían sin la pelota, algo peligroso considerando la pequeña ventaja en el marcador.

A los 63’ llegaron dos cambios más en Colo Colo con el ingreso de Jorge Valdivia y Esteban Paredes por Pablo Mouche e Iván Morales. La jerarquía entraba al césped del Monumental.

Para mala fortuna esta dupla duró la nada misma en la cancha, ya que a los 74’ el Mago se fue lesionado en reemplazo de Nicolás Blandi. También ingresó el juego Brayan Vejar por Gabriel Costa.

A los 81’ la visita tuvo una clara por medio de Leiva, quien sacó un centro peligroso que Cortés sacó con lo justo con su pierna derecha. Pudo ser el empate de los viñamarinos.

Los minutos finales tuvieron a un angustioso Colo Colo luchando por mantener la ventaja de 1-0, aguantando los embates de los viñamarinos en su afán de rescatar, aunque sea, un punto del Monumental. Finalmente, el marcador no se movería y el Cacique se quedaría con tres unidades de oro.

Triunfo vital para el Cacique en el mejor momento posible, sobre todo tras la mala imagen dejada el pasado miércoles en Playa Ancha ante Wanderers. Escapamos por unas horas del descenso y con la convicción de saber que este es el camino a la salvación. Quedan siete finales y hay que lucharlas todas.