Durante las últimas semanas ha sido tendencia en la plataforma Netflix la película La Sociedad de la Nieve, dirigida por el español Juan Antonio Bayona que narra la historia verídica sobre la tragedia de Los Andes. El 13 octubre de 1972, en medio de la montaña, un avión se estrelló con tripulantes que viajaban desde la capital uruguaya Montevideo a Santiago para un partido de rugby. De los 45 que se embarcaron en el país oriental, sólo sobrevivieron 16, rescatados el 22 diciembre de ese año.
Más de dos meses estuvieron en plena cordillera viendo morir a sus amigos y esperando ser rescatados, e incluso, tuvieron que llegar al extremo de alimentarse de cadáveres. Tras 72 días en la nieve, finalmente dos jóvenes se encontraron en un valle chileno con un hombre clave: Sergio Catalán, arriero que es considerado un héroe por haber cabalgado horas para dar aviso a las autoridades.
En esa época el presidente Salvador Allende, a través de una carta que reveló recientemente su nieta Maya Fernández, agradeció la labor de don Sergio y sus dos acompañantes que fueron vitales en el rescate: Juan Farfán y Pedro Cerda.
Además de ser reconocido por el gobierno chileno y uruguayo, Sergio Catalán recibió meses después el cariño del pueblo charrúa en Montevideo, donde asistió junto a la delegación de Colo Colo para el partido de desempate de la Copa Libertadores 1973 entre el Cacique e Independiente en el Centenario.
La presencia de Sergio Catalán junto a Colo Colo en la final de la Copa Libertadores 1973
Sergio Catalán es una figura importante para el pueblo uruguayo, luego de haber ayudado a Roberto Canessa y Nando Parrado para que los sobrevivientes sean restacados antes de que sea demasiado tarde. Y como el arriero era fanático de Colo Colo, viajó con el club a Uruguay para la final de la Copa Libertadores el 6 de junio de 1973.
Así lo confirma a DaleAlbo el periodista y académico de la Universidad de Chile, Eduardo Santa Cruz: “De Chile llevaron al arriero que encontró y auxilió a los uruguayos que lograron bajar desde la cordillera, en diciembre de 1972 (el accidente había sido en octubre), para lograr el apoyo del público uruguayo. Efectivamente, el público le dio una gran recepción al arriero, así como a los sobrevivientes y sus familias“.
Otro gran comunicador como Julio Salviat, Premio Nacional de Periodismo Deportivo 1996, también recuerda aquel viaje de Sergio Catalán junto a la delegación y el equipo que dirigía Luis Álamos: “Viajó con la delegación como un miembro más. Catalán ni siquiera conocía Santiago, y no lo iban a dejar viajar solo”.
Añade que en el mítico Estadio Centenario, donde hubo 50.000 personas para la final entre Colo Colo e Independiente, los sobrevivientes de la tragedia de Los Andes y don Sergio dieron una vuelta olímpica antes de la final. Citando al periodista Antonino Vera, otro Premio Nacional de Periodismo Deportivo, entrega una valiosa información de esa noche:
“Dio la vuelta olímpica completa acompañado de los sobrevivientes de la tragedia. Antonino Vera, que cubrió esa finalísima, nos contaba que fue una de las más estruendosas ovaciones que escuchó en un estadio“, dijo Salviat.
El apoyo del público uruguayo al mítico Colo Colo 73
En esa época si no se conocía al campeón en los partidos ida y vuelta de la final, se jugaba un desempate en una sede neutral de Sudamérica. Para ese año, Colo Colo jugó ante Independiente en el Centenario, pese a que sufrió descarados robos arbitrales tanto en empate 1-1 en la ida en Avellaneda, como el 0-0 en la vuelta en el Estadio Nacional.
Los Albos, en medio de un momento político muy tenso previo al Golpe Cívico Militar de septiembre, lograba reunir a hinchas de otros clubes del fútbol chileno. Pero con la presencia de Sergio Catalán, sumaron el apoyo de los charrúas asistentes como neutrales a la final de esa Copa Libertadores 1973.
“Los uruguayos fueron colocolinos de comienzo a fin y no dejaron de alentar. Una, por su eterna rivalidad con los argentinos. Dos, por el arriero“, agrega Julio Salviat.
Incluso, Independiente de Avellaneda, en su efeméride de los 50 años de aquella polémica Copa Libertadores que ganó por 2-1 en el alargue del tercer partido, reconoció que el Cacique fue local en Montevideo: “El bueno (partido de definición) se jugó en el Centenario y con el público uruguayo tomando partido por Colo Colo. ¿Por qué? A fines de 1972 un avión uruguayo cayó en la Cordillera y hubo sobrevivientes que fueron hallados por un arriero. Entonces, antes del inicio, el arriero dio una vuelta olímpica para que lo ovacionen todos los uruguayos que estaban en el estadio“.
Sergio Catalán y su cercanía con el pueblo uruguayo por el resto de su vida
Aquella vuelta olímpica y la ovación no fue la primera para el héroe de Puente Negro, puesto que también fue reconocido como hijo ilustre de la comuna de San Fernando en 2008, además de reconocimientos por parte del gobierno uruguayo. Incluso, en un museo en Montevideo sobre la tragedia de los Andes, una sala lleva como nombre “El arriero” en honor a él.
Los sobrevivientes de la tragedia lo invitaban regularmente a un partido de rugby que organizaban en el país oriental, y nunca se olvidaron de Sergio Catalán, ya que cuando estuvo enfermo y necesitó pasar por el quirófano, lo ayudaron económicamente con las operaciones tanto en 2007 como en 2012.
A los 91 años, falleció el 11 de febrero de 2020, y fue enterrado en el parque San Fernando, donde acudió uno de sus “hijos” uruguayos Gustavo Zerbino en representación del grupo que amagó a la muerte gracias a la desinteresada ayuda del arriero Sergio Catalán.