La mañana de este sábado se desarrolló en el Estadio Monumental la Asamblea Ordinaria del Club Social y Deportivo Colo Colo, instancia donde se presentó el balance y la memoria anual, así como inquietudes de los socios hacia la directiva que preside Matías Camacho.

En medio de un ambiente tenso con pifias a una respuesta del vicepresidente Alejandro Droguett sobre el entrenador de la rama de futsal (reconocido hincha de Universidad de Chile), donde indicó que “en el fútbol no hay camiseta, son profesionales”, la reunión tomó una pausa para que ingrese el ídolo máximo de la institución: Carlos Caszely.

El Rey del Metro Cuadrado entró acompañado de Magaly San Martín, directora de Socios y Socias Honorarias del CSD Colo Colo. Frente a la asamblea, Carlos Humberto Caszely recibió la medalla de socio honorario, un enorme reconocimiento al mejor jugador que vistió la camiseta alba en su centenaria historia, y que en toda su vida demostró su amor por el Cacique.

El discurso de Carlos Caszely en la Asamblea del CSD Colo Colo

El ídolo se mostró muy emocionado en el hall del Estadio Monumental, y comenzó su discurso recordando sus primeros años en el club: “Me cuesta bastante, por el cariño y el respeto del colocolino a este hombre que cuando venía para acá recordaba que hace 65 años, ustedes no nacían, me puse una polera de Colo Colo allá en el Club Hípico donde entrenaban los cadetes“.

“Ahí empieza ese peregrinar, por tantas historias maravillosas que me entregó este club. Yo lo conocí como Club Social y Deportivo Colo Colo allá en Cienfuegos 41, cuando tres veces a la semana, lunes miércoles y viernes, habían doctores y dentistas para atender a todos los que no podían ser atendidos. Esa época en que llegabas un lunes en la tarde para tomar una taza de té o un sándwich, esa casa histórica de Colo Colo donde fui el único hombre que me casé en esa sede, con una compañera maravillosa que duró conmigo 50 años. Me cuesta mucho venir para acá“, agregó entre lágrimas.

Emocionado, y con la voz quebrada, agradeció el reconocimiento y el cariño del pueblo albo: “Cuando me dijeron que querían hacerme socio honorario, les dije ‘no quiero interrumpir la reunión de ustedes’, porque sabía que una lágrima iba a rodar en mi cara. A veces son lágrimas de felicidad, a veces de tristeza, pero lo que me mantiene en pie, insisto, es el cariño y respeto de ustedes, a este hombre que ya pinta canas”.

Caszely entregó un emotivo discurso en la Asamblea del CSD Colo Colo | Foto: Guillermo Salazar (Archivo)

Caszely entregó un emotivo discurso en la Asamblea del CSD Colo Colo | Foto: Guillermo Salazar (Archivo)

El libro que escribió Carlos Caszely y su difunta esposa

El 22 de febrero de 2022 falleció María de los Ángeles Guerra, esposa de Carlos Humberto Caszely. Desde ese día el Chino no volvió a ser el mismo, al convivir cada día con el dolor inconmensurable de perder a su compañera de vida.

“Desde hace dos años me puse a escribir, historias, novedades, y ayer me encontré con este libro que solamente tienen mis hijos y yo, y a lo mejor algún día tendrán la oportunidad de verlo también: ‘Ama, Ríe, Sueña y Vive la Vida con Alegría’ es el título del libro, escrito por María de los Ángeles Guerra González y yo, libro póstumo“, dijo sobre el texto que tenía en sus manos, y procedió a leer una anécdota que refleja su amor por Colo Colo:

“Leyendo, me encontré una página, algo escrito hace muchos años, y dice ‘en 1978 ya teníamos dos hijas, Claudia y Barbra, y estábamos muy adaptados a España. Ella no quería regresar a Chile. Vida me dice (siempre me dijo Vida), ¿cómo vamos a volver si este es otro mundo, y hasta tienes ofertas del Sporting de Gijón y el Sevilla? Quedémonos acá’ me pedía. Mi respuesta fue ‘es cierto, acá estamos todos bien, tienes toda la razón, pero Colo Colo me necesita y Colo Colo es lo más grande‘, mencionó sobre su regreso a Chile para llevar al Cacique a otro título en 1979.

Cerró su discurso con un mensaje de vida hacia los colocolinos: “Sabía y sé del cariño y el amor por este hombre que está en los 74 años, que está en el último tramo de la vida, no sabemos cuánto tiempo nos queda, uno, dos, tres, cinco años. Ojalá todavía pueda caminar para que el próximo año, en los cien años desde que David Arellano fundó este club, podamos celebrarlo de la mejor forma posible. Un abrazo para todos y los quiero mucho“.