Ángel Carreño explicóqué pasó con el tema de las máquinas de bebidas que llevó a la embotelladora de Jaime Valdés. El tema no había quedado muy claro en su carta, y en conversación con Los Tenores de ADN entregó su versión de los hechos. El ex Colo Colo rompió en llanto en el diálogo.

“Te cuento toda la historia. Tenía mi fabrica, fabricaba la bebida, entré en quiebra.Cuando alguien te fabrica algo, significa que te maquila. Busqué por internet gente que podía llegar a una embotelladora, fui a otras más,llegué con uno de sus socios que es Carlos, conversécon él, que podía hacer la bebida, me enteré que estaba Jaime Valdés, me alegré, porqueme significaba cierta tranquilidad, porque cualquier problema me podía ayudar en algo”, expresó.

“Ellos no tenían las máquinas necesarias para desarrollar mi bebida. Les paso todas mis máquinas, la línea de producción la inventé yo, me costó sudor, lagrimas, dormí al lado de las máquinas.Les paso las máquinas, el error tanto míocomo el de esa empresa, fue como que no formalizamos nada, no hicimos nada con contrato, les entrego las máquinas, quedamos de acuerdo queellos me entregaban un producto con un cierto valor, yo lo iba a buscar, y era problema mío si los distribuía, se fue generando un circulo”, agregó.

Ángel Carreño defendió la camiseta de Colo Colo entre 2004 y 2005

“Por equiscosas no pude salir adelante, me metí en más deudas, se me dio la posibilidad de vender una de estas máquinas. Uno de los socios de Jaime me cerró las puertas, me dijo que no podía entrar más a la fábrica y que no podía ir a retirar ninguna cosa mía.Perfecto traté de dialogar con ellos, de conversar, no hubo forma. Fui dos veces al Monumental a hablar con Jaime. Una vez incluso estaba la madre de él. AJaime hasta el día de hoyle tengo mucho cariño, lo conozco desde los 14 años. Más grande estuvo en las divisiones (menores), después en el primer equipo de Palestino estuvimos juntos. Cuando se fue a Europa estuvo a punto de no irse, lo aconsejamos con compañeros. Así un montón de cosas”, complementó.

Luego reveló cómo fue la conversación con elPájaro: “Llego a hablar con Jaime, mi problema que era gravísimo casi me pongo a llorar en la cancha número 2 del Monumental. Le conté toda la situación, me dijo que lo iba a hablar con el socio. En segunda oportunidad ledigo que el socio le iba a decir un par de cosas que no eran ciertas. De todas formas Jaime le creyó al socio, me dijo que no me iba a pasar las máquinas, en resumen. Le dije ‘pucha Jaime no quiero hacer esto público, tu eres el conocido, yo no soy’. Me dio autorización, me dice ‘haz lo que quieras'”.

Además aseguró que nunca le pidió dinero: “Pasó un año y medio, lohice el otro día, no con el fin de atacar a Jaime, me sentí dolido con su actuar, y me podía haber ayudado, capaz que perdía igual el departamento. Capaz que lo perdía igual. Una máquina que me costaba10 pesos, la vendía en dos. Esos dospesos me ayudaban un montón. No le pedí plata, nada. Tengo las facturas, están a nombre mío. Técnicamente es apropiación indebida. No quiero ser más fuerte con situaciones, sé que él tiene familia, tendrá problemas, tendrá sus cosas, le tengoaprecio y cariño”.

¿Por qué no devolvieron las máquinas? según Carreño hubo deudas cruzadas no formalizadas.

“Tengo todo registrado en excel, tengo una deuda de 400 lucas, no lo pudimos solucionar, no tenía ni uno, no tenía plata ni para almorzar. Le echaba unas lucas a la camioneta para seguir dándole, buscar los productos, y con la esperanza de darle con todo. Uno de los socios le dice a Jaime que le debía 4,6 millones (de pesos)por arriendo de bodega, según él es así, lo que no es cierto. Si fuese así, yo le podría decir ‘túocupabas mis máquinas para tu productos, tus bebidas energéticas, también te las arrendé en 10 millones’. Yo no tengo ningún papel y él tampoco. Los acuerdos los hice con Carlos, no con Marcelo que es que le lava la cabeza a Jaime. El trabó todo, y hoy día me veo afectado con esto. Lo único que hice, fue pedirle mis cosas. Le expliqué mi situación, mis cosas, como me sentía, que era fuerte, lo que me dolió fue que no tuvo la humanidad, no sé como decirlo, me complican las palabras, pero es así”.

Por último hizo una solicitud a Jaime Valdés, a quien no le guarda rencor: “Que me llame, él tiene mi número”.