Justo Villar: Soberbio para despejar un remate peligrosísimo. Ordenó bien, mostró la jerarquía acostumbrada y terminó siendo factor.
Sebastián Toro: Desacomodado una vez más como lateral derecho. Cerró mucho en la jugada donde Ignacio Herrera la sacó del estadio. Si no era por eso, pudo ser el primero loíno. Su salida dando paso a Camilo Rodríguez dio a entender que a Héctor Tapia no le gustó su desempeño.
Christian Vilches: Salió mucho en la jugada donde le pasó por la espalda José Pérez (la misma del remate elevado de Ignacio Herrera). De ahí en más, no cometió mayores yerros, tuvo un buen cierre y se ubicó bien para despejar un remate de Cristaldo que se colaba.
Julio Barroso: Muy buen partido. Personalidad, buena ubicación, excelente tiempo-distancia para algunas jugadas que pudieron ser mucho más complicadas. Elegante para salir jugando.
Luis Pavez: Correcto, buenos cierres, incluso uno muy lucido donde propicio la salida desde el fondo con elegancia combinando con Julio Barroso. No se proyectó mucho gracias a la incesante presión loína.
Esteban Pavez: Le tocó mucho trabajo para tomar al mediocampo de Cobreloa y a los de arriba que se enganchaban, como Herrera y Méndez. Cumplió de manera correcta en labores de marcación.
Jaime Valdés: Muy desaparecido tomando en cuenta su habitual nivel. No pudo tomar el balón nunca en el primer tiempo y eso produjo que el equipo no encontrara salida. Recién ensayó un par de remates y algunas cesiones a sus compañeros cuando Tapia lo “soltó” sacando a Vecchio y poniendo a Baeza.
Emiliano Vecchio: Sólo tuvo dos jugadas. La primera fue un notable arranque desde mitad de cancha donde definió desviado levemente y luego cedió para un Esteban Paredes que arrancó desde un costado. Luego desapareció y tuvo una mano que bien le pudo costar la expulsión.
José Pedro Fuenzalida: Los pocos minutos que estuvo fueron de mucho dominio loíno, por lo que su labor se limitó a tratar de ayudar a defender.
Esteban Paredes: Incómodo con la férrea marca del cerco defensivo de Cobreloa. No le llegaron balones en el primer tiempo (salvo una que fue producto de un balón largo de Christian Vilches cuando el encuentro arrancaba), tuvo que bajar a buscarlos y fue perdiendo efectividad.
Felipe Flores: No tuvo mayor participación y, lamentablemente, su análisis en esta jornada queda supeditado al derechazo pugilístico que le tiró a un rival de manera inexplicable al saltar a pelear un cabezazo. Debió ser expulsado.
(28″) Juan Delgado: No ingresó bien. Impreciso, sacó centros que no fueron trascendentes salvo uno al segundo palo donde se estorbaron Luis Pavez y Felipe Flores. Lo incomodó mucho tener que bajar tanto a labores en el mediocampo.
(69″) Camilo Rodríguez: Por su sector ingresó Jonathan Chaves y no sería sencillo controlarlo, pero no tuvo mayores problemas. Se notó que maneja el puesto de lateral.
(78″) Claudio Baeza: Correcto al cerrar el mediocampo e intentar combinar con Valdés, que se adelantó tras su ingreso.
DT Héctor Tapia: Seguramente no esperaba ese nivel de presión y nivel físico que impuso Cobreloa. A diferencia del partido con Unión La Calera, esta vez no pudo encontrar las variantes justas para conseguir el triunfo, pero en eso tuvo mucho mérito el rival. Intentó con línea de tres por algunos minutos en el segundo tiempo pero se notó que esto no lo convenció e hizo ingresar a Camilo Rodríguez para volver a cuatro. Estos resultados y tipos de partidos así ayudan a ir corrigiendo errores y, seguramente, junto con Miguel Riffo sacaron varias lecciones.
Foto: Agencia UNO