Diego Rubio asomó por primera vez con el equipo de honor en la pretemporada de este año en La Serena. En los amistosos tuvo algunos minutos y ante Unión Española marcó. Lo primero que hizo fue tomar la camiseta con pasión y besarla.
Claro, si es el más colocolino de todos los Rubio como lo contó en entrevista con DaleAlbo hace unas semanas. Vivió el auge de su padre con el más grande y aprendió a amar esta instutición.
Es por eso que no se explicaba qué hacía en las inferiores de Universidad Católica, donde fue inscrito por razones de ubicación con respecto a su hogar y a su lugar de estudios.
“Cuando estaba en Católica fue justo el momento en que el “Bichi” llegó a Colo Colo. Yo era muy cercano al “Bichi”, iba a los entrenamientos y todo. Ahí me pregunté qué estaba haciendo en Católica yo si el club de mis amores es Colo Colo, yo lo amo, iba a los entrenamientos, a los partidos y decidí cambiarme porque siempre fue colocolino de corazón”, aseguró a ADN Radio “Diegol”.
Además, agregó sobre su puesto que “hace tres años me cambiaron de posición. Antes era volante de creación, luego fui como puntero y después los “profes” me pusieron de “9”, me enseñaron los movimientos y comencé a convertir goles”.
Mucho éxito para él en lo que viene y siempre con los pies en la tierra, que esto recién comienza.