Terminando el semestre anterior, Héctor Tapia tomó una decisión drástica: fue con juveniles al partido de ida de la primera fase de Copa Chile ante Ñublense y no le fue bien. En la vuelta, ya post intertemporada, puso a los titulares y casi logran darlo vuelta, pero no alcanzó y el Cacique se quedó sin un objetivo.
Ante esto, el DT reconoció que, de una u otra forma, “botó” este torneo. “Uno tiene que tomar decisiones. No era lo que más nos importaba, era tremendamente importante hacer una buena pretemporada y para ello debía darle descanso a los que faltaron. Quedamos eliminados, pero era una decisión que debíamos tomar para hacer una pretemporada que nos dejó muy contentos”, manifestó en el programa EPA! de Sonar FM.
“Gracias a eso estamos ahora con el plantel prácticamente completo. A veces eso te hace obtener resultados más a largo plazo y hoy se ve reflejado”, argumentó.
Finalmente, manifestó que “no tengo problema en asumir la dosificación, pero ante Iquique fue porque estábamos muy condicionados por las tarjetas. Corríamos mucho riesgo de perder jugadores (Paredes, Carmona y Valdivia) muy importantes de cara al clásico que era en nuestra casa”.