La década de los noventa fue la más exitosa para Colo Colo. La obtención de la Copa Libertadores en 1991 fue la consecuencia de años de trabajo y el comienzo de las vueltas olímpicas a nivel internacional, luego vinieron la Recopa Sudamericana y la Copa Interamericana.

El triunfo ante Olimpia de Paraguay no solo le permitió al Cacique la obtención de la Libertadores, también le entregó el derecho de disputar la Copa Intercontinental con el campeón de la Copa de Campeones de Europa, hoy Champions league, Estrella Roja del entonces Yugoslavia.

Equipos plagados de figuras donde destacaban: Daniel Morón, Lizardo Garrido, Jaime Pizarro, Patricio Yañez, Marcelo Barticciotto y Rubén Martínez por los albos. Mientras que en los europeos brillaban: Zvonko Milojević, Sinisa Mihajlovic, Vladimir Jugović, Dejan Savićević y Darko Pančev entre otros.

El partido se disputó un 8 de diciembre de 1991 en el Estadio Nacional de Tokio. Colo Colo nunca pudo sentirse cómodo en el terreno de juego y terminó sucumbiendo ante los embates de los de Belgrado. Vladimir Jugović en dos ocasiones y Darko Pančev decretaron el 3-0 final con el que los Albos, dirigidos por Mirko Jozic no lograron el sueño de coronarse como el mejor equipo del mundo.

Coincidentemente, y exactamente 29 años después, un 8 de diciembre el elenco popular volverá a disputar un partido fundamental al que los hinchas lo han denominado una verdadera Final del Mundo.

La historia es muy distinta a la de casi tres décadas. Un club concesionado y bajo el mandato de una sociedad anónima tienen a Colo Colo en la última posición de la tabla con 18 puntos. El próximo rival es Deportes La Serena, penúltimo con 21 unidades. Ahí, la importancia de los puntos. En el Monumental esperan ganar para comenzar a zafar de la zona de descenso.

La nueva Final del Mundo está programada para este martes a las 18:30 horas en el Estadio Monumental.

Japón cada vez se ve más lejos.