En la discusión sobre el mejor arquero de Colo Colo en sus cien años de historia, siempre estará el nombre de Roberto Rojas, quien en la década de los 80 fue capitán y figura del Cacique. Hoy, a sus casi 68 años, vive una vida tranquila en Brasil, país al que llegó para jugar en Sao Paulo entre 1987 y 1989.
El Cóndor conversó en entrevista con Redgol sobre su presente en tierras brasileñas, a días de su cumpleaños (8 de agosto): “Estoy jubilado acá. En una nueva etapa en ese sentido, cuidándome la salud, estando cerca de mi familia. Muy tranquilo“, comenzó el exarquero, que sufrió bastante en los últimos años debido a enfermedades hepáticas.
Los grandes ídolos de Roberto Rojas en el fútbol
En la entrevista con el citado medio, el Cóndor Rojas señaló a los ídolos que tuvo y que tiene en el fútbol, particularmente en la posición de portero, en la que brilló en el fútbol chileno: “Mi ídolo en el arco lo divido en tres partes: los que no vi, los que estuvieron en mi época y los de afuera. El Sapo (Sergio) Livingstone es el primero, por la historia, me gustaba saber de los jugadores anteriores a mi generación y me hablaban maravillas, porque no lo vi jugar“.
También señaló a uno que fue mayor que él, pero contemporáneo y su compañero tanto en el arco de Colo Colo como de la Selección Chilena: “Luego el Gato (Mario) Osbén, que fue mi compañero, lo que hizo hasta el 82 fue espectacular“.
“Mirando al extranjero están el Pato Fillol y Sepp Maier, buscaba lo poco que llegaba desde Alemania para ver cómo llego a ese nivel. Miraba también a Harald Schumacher, era una escuela de arqueros alemanes en esa época. Usaba una camiseta celeste la que yo después repliqué”, finalizó en su repaso por los ídolos que tuvo en el fútbol.
¿Y Claudio Bravo?
Por obvias razones, Rojas no mencionó a Claudio Bravo por ser de una generación completamente posterior a la de él. Pero también se refirió al Capitán América, el gran arquero de la Selección Chilena en toda su historia:
“Bravo viene de una época en la que le mejoraron los defectos. No me incomoda que me comparen con Bravo, que marcó una era en el fútbol chileno. Es un privilegio de hecho. Pero no se pueden comparar estilos. Él tuvo una persona a su lado y yo nunca lo tuve (preparador de arqueros)”, comentó el Cóndor.
Cerró con la principal diferencia entre ambos, la que se debe poner en la balanza a la hora de compararlos debido a que son de distintas épocas: “Hablando de forma simple, yo me hice de forma artesanal con mis condiciones. Claudio nació con grandes condiciones y las mejoró con un profesional al lado. Son épocas diferentes y la forma de jugar son distintas”.