No hay dudas de que Marcelo Ramírez fue siempre un arquero con un estilo bien
definido. Su amor por volar bajo los tres tubos y la manera que tenía de atajar los penales eran algunas de las marcas registradas del Rambo. Sin embargo, el orden y el respeto por la preparación para momentos importantes también eran características propias del ex arquero de Colo Colo.
Por eso no es extraño que su primera gran actuación por los albos tuviera detalles propios de un guardameta como él. Así, en entrevista con nuestro sitio, reveló hechos inéditos del cómo se gestó su cambio (enlace del cómo se gestó el cambio) y, además cómo se preparó para tan importante momento en su carrera.
"Siempre he sido muy estructurado. Antes del partido dije ¿dónde hay un lugar en el estadio, donde yo pueda estar tranquilo si esto comienza a tomar ribetes de que vamos a penales para hacer mi preparación mental y física? Encontré un lugar a la entrada de camarines, un espacio chico, que me imagino que lo usaban para guardar materiales de mantención del estadio. Si veo que va para empate, me vengo para acá", comenzó contando el Rambo.
"Cuando el partido seguía y seguía, Daniel (Morón) atajaba todo, faltando cinco minutos, dije me voy. Le digo a Marcelo Oyarzún (PF de Colo Colo), que capaz que esto termine en empate que me voy porque necesito prepararme bien. Me fui a este lugar, había una ranurita donde podía ver el partido. Me preparaba mentalmente, calentando, todo lo que había que hacer, hasta que llega el pitazo final. Ya, me tocó, no hay vuelta. El que se quiere comer el mundo, tiene la posibilidad en cinco minutos más”, comentó emocionado.
Respecto a cómo vivió la entrada al campo de juego, Ramírez confesó que sentía una
responsabilidad enorme, pero que nunca se amilanó ante la mirada de los jugadores brasileños.
"Nervios vas a sentir siempre, miedo al fracaso también. El tema es como lo gestionas. Si esto te invade, se apodera o si lo puedes controlar y usarlo como energía positiva. Obviamente se me pasaron muchas cosas por la cabeza, porque sabía que iba a tener a medio país encima mío pendiente, con la responsabilidad de atajar un penal”.
"Cuando voy al sector a hablar con Yeyo Inostroza (ayudante técnico de Colo Colo) para preparar el cambio, había un revuelo en la cancha y es ahí donde entro. Entonces, en un momento, uno de ellos se da cuenta que yo voy a entrar y que el arquero que estaba jugando iba a salir y se va donde el árbitro a reclamarle”.
"Es, en ese instante, que Marcelo Ramírez siente que sacaron una pequeña ventaja porque, desde lo mental, el momento significó mucho. Es que el hecho de que “ellos veían que estaban sacando al arquero que estaba manteniendo el empate, porque atajó muchísimo, para que entrara otro, es porque este otro era muy bueno, entonces los jugadores de Cruzeiro se alteraron. Yo entré con el pecho inflado, porque necesitaba transmitir energía, seguridad. Pasaba al lado de ellos y los miraba con el pecho inflado y el árbitro, que había estado en la reunión dos noches atrás, decía que estaba todo en regla”.
Finalmente, Claudio Borghi, Héctor Adomaitis, Javier Margas, Eduardo Vilches y Jaime Pizarro convirtieron sus respectivos tiros. Mientras que el Rambo, atajó el segundo lanzamiento de Cruzeiro, obra de Marco Antonio Boiadeiro.
