Antes de la paralización del fútbol por la pandemia del coronavirus, Santiago Wanderers atravesaba un mal momento deportivo que ahora lo tiene como colista en la tabla de posiciones, con apenas cuatro puntos en siete partidos.

Sin embargo, la falta de ritmo de todos los equipos le da una nueva posibilidad para remontar y esperan aprovechar las dudas del Cacique para rescatar puntos en el Estadio Monumental este sábado a partir de las 13:30 horas.

Miguel Ramírez lo entiende así, sabe que los otros elencos no llegarán con “el mismo ritmo e intensidad antes de la pandemia. Habrá muchos lesionados y la adaptación a los duelos será diferente, entonces muchos jugadores pueden tener problemas”.

En diálogo con Redgol, el Cheito manifestó que para él lo que pueda ofrecer Colo Colo es una incógnita. "Uno puede analizar al rival de acuerdo a lo que venían haciendo antes de la pandemia, pero ese funcionamiento va a ser distinto en el retorno. Hay que tener los sentidos puestos, preocuparse de nuestro propio funcionamiento y será fundamental el poder sostener lo colectivo que es nuestro fuerte para quedarnos con los tres puntos", profundizó.

Además resaltó el respeto que siente por Gualberto Jara, con quien coincidió en el Cacique durante sus años como jugador. "Lo conozco cuando llegó con Gustavo Benítez y trabaja muy bien lo táctico. En esta oportunidad la va a aprovechar, es su pasión y va a entregar lo mejor de él para ser protagonista como exige Colo Colo. De a poco se vio su sello, pero fue muy poco lo que se pudo ver, pero por todos los días que han pasado lamentablemente tuvo que partir de nuevo", comentó.

Previo a este compromiso lamentará tres ausencias, como el suspendido Francisco Alarcón, expulsado en el último partido con Palestino. A él se suman Juan Carlos Soto y Daniel González, ambos con molestias físicas.

Esto se vuelve un dolor de cabeza para el Cheito, ya que los dos primeros fueron titulares en casi todos sus partidos y su plantel a diferencia de Colo Colo es más reducido.

¿Cómo juega Wanderers?

Antes de la suspensión del Campeonato los caturros nunca repitieron el once y constantemente cambiaron su dibujo táctico, donde lo que más repitió es la línea de tres en el fondo y variando su cantidad de atacantes.

Son un equipo que prefiere atacar antes que replegarse, atacando mucho por los costados para aprovechar la velocidad de Nestor Canelón o Sebastián Ubilla, pero que ha pagado cara su falta de gol y desconcentraciones que le costaron jugar la mitad de los partidos con un expulsado.

La formación que más utilizaron fue con Mauricio Viana; Juan Carlos Soto, Ezequiel Luna, Bernardo Cerezo; Néstor Canelón, Francisco Alarcón, Juan Pablo Miño, Marcos Medel, Carlos Rotondi; Sebastián Ubilla (Gustavo Lanaro) y Enzo Gutiérrez.