Colo Colo es el único club chileno que ha podido levantar la Copa Libertadores de América, un hito que hoy cumple 30 años, y que, por la realidad del fútbol nacional, se ve muy difícil que otro equipo logre esa hazaña.

Sin embargo, nunca faltan los envidiosos de otros elencos que sin haber visto jugar al equipo de Mirko Jozic han intentado minimizar el logro. Caen en argumentos básicos de que los albos enfrentaron a rivales fáciles o que los mejores del continente no querían disputar el torneo. Nada más alejado de la realidad.

Es cosa de ver los participantes. A Argentina lo representaron sus clubes más grandes que son River Plate y Boca Juniors. De Brasil fueron los más populares como Flamengo y Corinthians. Por Paraguay estuvo el campeón vigente Olimpia, más Cerro Porteño, segundo equipo más importante. De Colombia dijeron presente Atlético Nacional (campeón de 1989) y América de Cali (animador del certamen entre los 80 y 90). Nacional de Uruguay (tres veces campeón del certamen), además de Universitario, Liga de Quito y Barcelona de Guayaquil (vigente subcampéon), entre otros.

Todos los clubes de América sueñan con levantar el trofeo que está en las vitrinas del Cacique. Si bien por razones obvias no se jugaron con determinados rivales, los albos tuvieron que verse las caras con escuadras de jerarquía.

Sus rivales

En fase de grupos, los equipos chilenos quedaron emparejados con los ecuatorianos. Colo Colo fue puntero de su grupo sobre Deportes Concepción, Liga de Quito y Barcelona de Guayaquil. Este último equipo asomaba como el más duro escollo, ya que venía de ser subcampeón de la edición de 1990 y tenía en sus filas a jugadores de la talla de Marcelo Trobbiani y Rubén Insúa, pero los albos fueron muchos para ellos.

En octavos de final el conjunto popular enfrentó su llave más sufrida ante Universitario de Lima, donde destacaban Álvaro Barco, José Carranza y Andrés González. La serie fue apenas 2-1 para los chilenos con el recordado penal de Rubén Espinoza.

Barcelona era un equipazo que había llegado a la final de 1990.

Barcelona era un equipazo que había llegado a la final de 1990.

En cuartos de final se enfrentaron a un coloso del continente por aquellos años como Nacional de Montevideo, equipo que había sido campeón en 1988 y sumaba tres trofeos continentales. Venían de jugar contra los brasileños en fase de grupos y tenía a nombres de la talla de Marcelo Saralegui, Jorge y Julio Dely Valdés, y Vénancio Ramos. El Cacique los barrió para llegar a semifinales.

¿Equipos malos? Boca Juniors era el rival en semifinales, para muchos, el favorito para alzarse con la copa y que dejó en el camino a Corinthians y Flamengo, consecutivamente. En su plantel destacaban Gabriel Batistuta, Diego Latorre, Blas Giunta, además de ser dirigidos por el legendario Óscar Tabárez. El resultado ya es conocido.

La dupla de Batistuta y Latorre causaba estragos en el continente.

La dupla de Batistuta y Latorre causaba estragos en el continente.

La final fue ante Olimpia, el campeón vigente, que tenía como estrellas a Jorge Battaglia, Raúl Amarilla, Carlos Guirland y Gabriel González, un rival calado que sucumbió ante el poderío de los de Mirko Jozic.

Ni de cerca es el campeón con peor porcentaje de rendimiento

Algunos se han atrevido a decir que Colo Colo es el campeón con peor rendimiento histórico del certamen, otra falacia. Los cinco peores porcentajes son de Olimpia (1990) con un 58,3%, Nacional (1988), con un 57,1%. El grupo de los que tienen un 54,8% que integran Atlético Nacional (1989) Vélez (1994), Palmeiras (1999), San Lorenzo (2014). Cruzeiro (1997) y River Plate (2015), con un 52,4% y lidera ese ítem Liga de Quito (2008) con un 47,6%.

El Cacique se coronó campeón tras vencer en 7 de sus 14 partidos, cayó en 2 ocasiones y empató cinco, sacando un 61,9% de rendimiento. Ni de cerca, el campeón con peores números.