El CSD Colo Colo presentó un lineamiento estratégico en el cuál se propuso un desarrollo del primer equipo, de los juveniles, profesionalización del fútbol femenino y también mejoras sustantivas al estadio y la experiencia de sus asistentes.

Sobre este último punto, en reiteradas ocasiones han manifestado la necesidad de refaccionar el Monumental, argumentando que la infraestructura está evidentemente desmejorada.

En conversación con Dale Albo, Harold Mayne-Nicholls apoya esta postura, además propone alternativas para poder financiar el proyecto y los beneficios que puede traer tanto al club, como la comunidad cercana al estadio.

¿Una opción para generar esos recursos que necesita el club para invertir en esos terrenos podría ser la concesión del estadio?

A mí eso no me parece, quizás el directorio más adelante determine otra cosa, pero yo no lo comparto. Lo que he conocido de ese tipo de concesiones a terceros, es que ayudan a la mantención por supuesto, pero generan un tremendo problema de uso. Si, por ejemplo, pasa una desgracia en la cancha por un entrenamiento del primer equipo y tiene que irse a la cancha del estadio, pero la concesionaria puede decir que justo ese día tiene una actividad de ellos y ahí se pierde sentido. Por eso, si ese tema va al directorio yo siempre voy a decir que el estadio tiene que estar administrado por Colo Colo, no creo que sea bueno que venga un tercero, eso genera un ruido.

Ahora lo que no es lo mismo, es que el estadio puede tener un nombre de empresa y que ellos paguen una cantidad y eso nos sirve para otros proyectos. Pero la administración siempre tiene que estar en manos del club.

¿Alguna otra alternativa que crea sirva para generar estos recursos que evidentemente necesita el club para un proyecto como el de desplazar el centro de entrenamiento o mejorar el estadio?

Hasta ahora hay dos proyectos de infraestructura. Uno es desplazar el centro de entrenamiento porque como dije antes, nos quedó chico. El otro es refaccionar el estadio, ahí se pueden conseguir recursos a través del nombre, de palcos, distintos sistemas que se busquen.

Un tercero, que siempre puede ser interesante por las distintas ramas que tiene el club, es tener un gimnasio, hay que estudiarlo bien. Un cuarto que siempre está ahí, es que la ubicación de estos terrenos hoy día es privilegiada, a diferencia de los años 50 cuando se adquirieron, por eso podemos sacarle partido al uso del terreno. Por ejemplo, que la gente use los estacionamientos de lunes a viernes y nos genere una cantidad de recursos como las empresas que se dedican a los estacionamientos, que hoy es un bien súper escaso al que se le puede sacar provecho.

Podría quizás hacerse más estacionamientos y subterráneos, pero no sé si habría permiso del municipio o la calidad de la tierra que hay lo permita, eso necesita estudios. Eso puede solucionar un problema grave que es la falta de estacionamientos el día de los partidos, pero también se armaría un tráfico para salir del estadio, lo que sería un desastre. Pero hay que estudiarlo, porque puede ser beneficioso para todos. La comunidad vería descongestionado sus barrios, los hinchas tendrían más estacionamientos y nosotros generamos un ingreso extra para los proyectos como construir el nuevo centro de entrenamiento.

Volviendo a lo que usted mencionó sobre la posibilidad de refaccionar el estadio. Desde el CSD Colo Colo han dicho que eso debería ser un tema prioritario para mejorar la experiencia del hincha, ya que los accesos no son buenos, la gente se aprieta y hay sectores con mala visibilidad ¿Comparte esa postura? ¿Si faltaran recursos, esta debería ser la prioridad?

Es que van de la mano. No es que uno afecte al otro. Remodelar el estadio o cualquier solución similar no tiene que ver con el desplazamiento del lugar de entrenamiento. Necesitamos más espacio físico para entrenar mejor y darle más comodidad tanto a jugadores como a quienes los acompañan, es una necesidad.

En cuanto al estadio, lo comparto y hay muchos lugares que son casi ciegos, hay que mejorarlos. Ahora es un problema de años, porque se diseñó así, tiene ángulos de pendiente no muy sugeridos en el resto del mundo. Esta pendiente es la que no deja ver en ciertos lados y su visión empeora con el colchón de seguridad que ponen en el sector sur por la presencia de la barra visitante, y otra gran cantidad de gente no puede ver lo que pasa en esa esquina. También hay que ponerse en el escenario que cuando se diseñó por primera vez el estadio no había carteles publicitarios rodeando la cancha y hoy hay dos filas de estos, tampoco había lienzos. Entonces esos sectores ahora no se pueden vender.

¿Cómo puede proyectar su trabajo a largo plazo considerando que este es un sistema que sufre varios cambios de mando según quién tiene más o menos acciones y que en Colo Colo también hay cambios directivos todos los años?

La única manera es la demostración empírica de que esto termina siendo un beneficio para todos y por eso es importante que haya gobiernos corporativos. Son decisiones que de mi punto de vista no pueden ser políticas, sino que casi diría yo de la industria. Vamos a la práctica, si una parte del directorio se niega a remodelar el estadio, nunca albergar una final de Copa Libertadores, que ahora es con sede neutral, porque no se puede vender todo el estadio por la mala visibilidad.

Hay partes que tienen que entender cuando lo que se hace trae beneficios, independiente quién los traiga, hay que mantenerse unidos.  

Hay más necesidades, hubo una reunión de la comisión que quiere organizar el Mundial del 2030 y hoy el Monumental no puede recibir un partido de Mundial por todo esto que he dicho. Ahí perderíamos una posibilidad de generar ingresos extras por el uso de nuestro estadio. Hay una realidad clara de como la construcción de un nuevo estadio trae muchísimos beneficios a sus clubes como el del Atlético de Madrid o Bayern Munich. Por ejemplo, saben vender sus palcos vips a empresas que les pueden traer potenciales clientes o auspiciadores y esos son recursos adicionales.

¿Pero cómo hacer que una inversión tan grande como remodelar el estadio sea rentable, tomando en cuenta que hoy van 22 mil personas en promedio al Monumental, que es la mitad de la capacidad actual?

Ahí hay un problema. Es algo que hay que trabajar, ser capaces de desarrollar un proyecto para que venir al estadio sea una experiencia monumental positiva. Es un trabajo mucho más grande que poner cemento, un clavo y martillos. Hay que integrar a toda la familia colocolina, que esto sea un beneficio social para todos.

¿Una manera sería captar más socios, que es una forma de fidelizar más al hincha o rebajar el precio de las entradas, que es uno de los reclamos de la gente que la encuentra cara?

Es algo discutible, no es tanto más caro que ir al cine. Ahora en paralelo, la entrada es cara, pero tenemos jugadores de nivel y tenemos que pagarles, hay que poner esas variables en el tema. Eso sí, no está en la cabeza del presidente (Aníbal Mosa) el subir el precio de las entradas, de hecho, ya se sacó un paquete para rebajar el precio de algunos sectores para los partidos con Audax y Puerto Montt.

Tener más socios es el interés de todos nosotros, que la Corporación agrande su base de socios y que esos mismos se abonen para que tengamos asegurado un flujo de ingreso anticipado y no dependamos de variables que te dije antes, pero no es tan fácil como sólo bajar el precio de la entrada. Hay que recordar ese partido con Santiago Wanderers el 2007 que se puso la entrada a mil y fue un caos que trajo otro costo paralelo.

Se ha conversado con la gente del Club Social la posibilidad de crear el socio abonado y estamos esperando que nos traigan una propuesta, porque creemos que ellos ahí tienen más que hacer que nosotros. Ya no se puede implementar este año, estamos muy avanzados, pero puede ser la gran novedad del año que viene, es interesante en todo punto de vista.