Por Camilo Azar, médico traumatólogo Clínica MEDS
Estadísticamente, junto con los tendones, las estructuras que más se lesionan con la práctica deportiva, son los músculos y pasa a ser una patología relevante y prevalente (de mucha frecuencia).
Consideraciones anatómicas
La fibra muscular es un elemento estructural básico del músculo, que es una larga célula conectada con el tendón y hueso sobre los cuales actúa. La función básica de los músculos es producir y modular el movimiento articular, controlados por nervios periféricos.
Se estará en presencia de una lesión muscular cuando existe algún tipo de alteración de la estructura del músculo y puede ir desde una contractura hasta un desgarro propiamente tal.
En el desgarro hay una alteración de la anatomía del músculo (algunas fibras se han dañado) y la contractura es un estado de semi contracción, que normalmente tiene el músculo y pasa a aumentar por distintas razones. Cuando sientas la molestia, lo mejor es parar y evitar un daño mayor. Coloca hielo para bajar la inflamación que se producirá antes de ser evaluado por un médico.
Si hay desgarro, existe rotura de fibras.
Los músculos que más se desgarran son aquellos que cruzan más de una articulación y un alto porcentaje ocurre en la zona de los gemelos, isquiotibiales y en el recto anterior del cuádriceps, que también cruza dos articulaciones (cadera y Rodilla). Estos músculos tienen una demanda mecánica muy significativa y están expuestos al mecanismo de distensión y desgarro secundario cuando el músculo se encuentra en estado de contracción.
Los exámenes necesarios que determinarán la magnitud de la lesión son: Ecotomografía y Resonancia Magnética.
Prevención
Fundamental resulta realizar un buen trabajo muscular de las zonas más expuestas. Fortalecer cuádriceps, isquiotibiales y gemelos son claves para evitar lesiones. Además, antes de comenzar el deporte, debes realizar un calentamiento previo de 10 a 15 minutos, acompañado de un trabajo de elongación.
Tipos de desgarros:
Desgarro Miofacial: Es superficial y compromete pequeñas fibras del músculo.
Desgarro de tipo fibrilar: Es de tipo lineal (muy fina) y ocurre en el espesor del músculo.
Desgarro Multifibrilar: Varias fibras se han roto y es de mayor importancia clínica y consta de varias lesiones lineales.
Desgarro Fascicular: Compromete más de una fibra que están metidas dentro de un fascículo. Es una lesión de mayor trascendencia, puede ocurrir en el espesor del músculo o en su periferia, donde se acompañan de compromiso fascial y presenta hematoma.
Rotura completa: Es una rotura de gran parte del músculo. Es una lesión grave que dejará algún grado de pérdida de la función. Comprende desde un grueso segmento hasta todo el espesor del músculo.