En octubre de 2018, se dio a conocer la noticia que Umbro vestiría a Colo Colo a partir del término de contrato con Under Armouren junio de 2019 y hasta diciembre de 2023 a cambio de cuatro millones de dólares por temporada.
La marca inglesa le ganó la licitación a Adidas que apareció a última hora con una oferta que en el papel era menor, pero que si se cumplían las variables de venta, podía incluso superar los 12 millones de dólares que puso Umbro sobre la mesa.
Sin embargo, en medio de la pandemia, la situación cambió y surgieron los problemas, de tal modo que ayer, Blanco y Negro le informó a la Comisión para el Mercado Financiero un hecho esencial, donde acusa a la marca inglesa de “graves y reiteradosincumplimientos de contrato”.
En la carta mandada y firmada por Alejandro Paul, gerente general de la empresa que administra Colo Colo, se lee que Blanco y Negro acude a la CMF para informar que ha buscado por todos los medios posibles que Umbro, le pague lo comprometido en el contrato, cosa que no ha ocurrido.
Actualmente se encuentran incumplidas, por Comercial Depor Limitada (indistintamente “Comercial Depor” o “Umbro”), diversas obligaciones establecidas en el contrato. Por lo mismo, Blanco y Negro S.A. buscó mecanismos que permitieran regularizar los pagos que Comercial Depor le adeuda. No hubo respuesta positiva por parte de Umbro, quedando en evidencia que no existe interés real en cumplir los términos del contrato.
La misiva dice además que Blanco y Negro S.A. se reserva el derecho de ejercer cualquier tipo de acción legal en contra de su socio comercial si no ocurren los pagos, “con el fin de reducir, de la mejor forma posible, las consecuencias negativas e impacto financiero que esta situación traerá a la Sociedad”.
Un problema económico más para Blanco y Negro que lo pasa mal durante la pandemia y que se podría traducir en un término anticipado a su contrato por cuatro años con Umbro y lo obligaría a salir a buscar una nueva marca que lo vista.
