Esta semana, El Mercurio informó que referentes del plantel de Colo Colo le tienen prohibida la entrada a Marcelo Espina, gerente deportivo, al camarín del primer equipo. Esto por las versiones contrapuestas entre lo que dice en la prensa con lo que finalmente hace, según estima.

El punto más tenso de esto se dio con Héctor Tapia, cuando el Calamar almorzó con Tito el lunes donde se juntaron para ver su futuro y le dijo que estuviera tranquilo, pero luego estuvo a favor de su despido en el cónclave realizado en las oficinas de Gabriel Ruiz-Tagle.

No obstante, y pese a que sí reconoció que hubo un distanciamiento en su momento, Esteban Paredes negó que Espina esté “cortado” por el plantel.

“No sé de dónde sale eso, del estadio, si lo inventan. Nada de eso ha pasado. Entra al camarín como el gerente deportivo, cualquier situación él va y nos habla. Es totalmente mentira”, sentenció el capitán.

Espina debe decidir este mes la continuidad de varios jugadores y, por cierto, también deberá informar a Blanco y Negro el perfil de técnico que quiere para Colo Colo en 2019.