Patricio Yáñez recordó el mítico partido entre Colo Colo y Boca Juniors en el Estadio Monumental del 22 de mayo de 1991, que hoy cumple 29 años. El encuentro terminó en triunfo 3-1 para el Cacique. El exatacante afirmó que ambos equipos pensaban que el ganador se quedaba con la Copa Libertadores.
"Si, la verdad que eso era, era el pensamiento de los jugadores de Boca Juniors con razón a pasar esta llave. Fue una jornada donde nosotros marcamos cierta claridad en la segunda mitad, quizás no con tantos apuros para Boca, que logró controlarlo y pudo abrir la cuenta comenzando el segundo tiempo", dijo en Deportes en Agricultura.
"Las indicaciones de (Mirko) Jozic, de ganar a lo guapo, metiendo pierna fuerte, cambiaron el rumbo partido. Se consiguió una victoria importante. Quien pasaba, sin mirar en menos a Olimpia, tenía muchas cartas para ser el campeón de la Copa Libertadores de América", agregó.
La expulsión
El histórico exdelantero se refirió a la tarjeta roja que recibió, tras el conflicto en la cancha: "Todavia no sé por qué. El otro día hablábamos con Juan Simón y Diego Latorre y decían 'Pato ¿Por qué te expulsaron?' no sé si le metí un viaje a Blas Giunta. En el momento que él recupera el balón, el balón se va al foso, los peloteros se lo entregan a Marcelo Oyarzún, ahí haciendo tiempo, todo lo que era el caos, veo cuando golpea a Marcelo Oyarzún, me voy de frente, y también lo bajé, creo que eso fue. Juan Simón dijo que en todo el momento me tenía agarrado, me tenía tomado. No tengo muy claro ese panorama".
Además aseguró que hubo duelo aún más difícil: "Felizmente se ganó el partido, después el resto del plantel supo ganar la Copa Libertadores. El partido de vuelta con Universitario, fue el más complicado a nivel de local".
Yáñez respondió a Rubén Espinoza, quien dijo que hizo el amague a pelear y luego se fue: "Si (ríe), sabía que estaba en la mira, quería jugar la final, entendía que si el resultado era adverso, podía quedar la escoba en el Monumental, pero pudo más eso, el ver al compañero agredido y actuar estupidamente".
"Tampoco hubiese podido jugar, porque tuve una caída, andaba con inyecciones en el brazo, lo que no me hubiese permitido jugar contra Olimpia, al menos el partido de ida. Eso es historia, finalmente este fue un partido que quiero dejar muy en claro que lo ganamos muy bien en los 90 minutos de fútbol, y así lo reconoce la gente de Boca", cerró.
