Colo Colo y Palestino se ha vuelto un auténtico clásico en el fútbol femenino y este fin de semana se enfrentaron en el Estadio Los Nogales, con triunfo por 1 a 0 de las Guerreras Albas con anotación de Yastin Jiménez. Este resultado las mantiene en la cima de la tabla de posiciones 18 puntos.

 

Pero la cosa no terminó bien, su hinchada comenzó a gritarles insultos racistas a la jugadora brasileña de Palestino Jenefer Jesunio. Según testigos, una de las involucradas sería la madre de Bárbara Muñoz, zaguera colocolina.

Las cosas no se calmaron ni saliendo de camarines, ya que Carla Guerrero, seleccionada nacional que actualmente se recupera de una lesión y veía el partido desde la galería, habría golpeado a Dominique Chamorro, quién le respondió a la Jefa.

“Es un pésimo ejemplo para las jugadoras porque ella es una figura pública. No es algo personal contra Carla, pero no puede meterse en una pelea de esa manera”, dijo al diario La Cuarta el dirigente de Palestino, Omar Droguett.

Agregó que tomarán medidas por los insultos de la madre de Bárbara Muñoz: “Jenefer está muy afectada y nosotros nos vamos a querellar por la ley Zamudio, eso es extra futbolístico, la gente de ellos nos pidió disculpas, pero son cosas que no pueden pasar en una cancha”.

La jugadora de Palestino, Francisca Clare, también acusó agresiones por parte de La Jefa una vez finalizado el partido: "Antes de ser rivales, somos compañeras y merecemos respeto (...) Pero antes de ser cualquier cosa, somos personas y que ella como seleccionada nacional me avergüence de esa manera me provoca impotencia y rabia".

Por otra parte, Carla Guerrero se descargó a través de su cuenta de Facebook: “Llega corriendo una jugadora de palestino, la número 22, a lanzar un pelotazo, dijo muchos garabatos y ahí yo sí le respondí y le devolví los garabatos, como ella estaba tan exaltada tiro hasta un escupo y ahí si me dio rabia, si le dije garabatos y le grité (…) Yo si la quería encarar por haber tirado el pelotazo y por tirar el escupo”.

También aseguró que quiso poner paños fríos a la disputa llamando a las personas correspondientes.