Una verdadera polémica desató el informe arbitral de Fernando Véjar, quien explicó por qué echó a Gustavo Quinteros, los insultos de un utilero y Leonardo Gil, además de que el camarín de árbitros estuvo cerrado con candado post partido.

"Finalizado el partido, cuando logramos llegar hasta la puerta del camarín de árbitro, este se encontraba cerrado con candado, lo cual provoca estar cinco minutos fuera de éste, teniendo que soportar gritos de funcionarios de Colo Colo. Al solicitar la llave, nos indican que ‘nadie la tiene’ y que ‘se había perdido’", expresó Véjar.

Este hecho fue llegó a oídos de Ángel Botto, ex presidente del Tribunal de Disciplina, quien en conversación con Radio Cooperativa, explicó que el Cacique incluso puede perder la localía.

"Van a citar al club, sin duda. No es normal lo que ocurrió, no puede ser posible que los árbitros lleguen al camarín y la puerta no esté abierta, es una provocación. Las sanciones van desde la amonestación, multa, y se puede hasta suspender el estadio, quitar la localía", contó el abogado.

También habló de los reclamos de Leo Gil. "Reclamo destemplado contra el cuarteto referil. Como fue después del partido, el tribunal tiene que citarlo. Y puede que le den una fecha. Cuando hay expresiones más directas, coprolálicas, y más directas hacia algunos de los árbitros, se toma como insulto grave", expresó.

Para finalizar dijo que la expulsión de Quinteros no es válida, "es una sanción, multa, al club. Si lo denuncia el árbitro, hay que tomar acción, tiene que ser citado el club. Hay que escuchar los descargos, hay que acreditar que es un aparato electrónico y que estaba siendo usado para el propósito, siempre es multa. No pueden mostrar roja por eso, no está en las reglas".