Colo Colo enfrentó esta mañana un partido clave en sus aspiraciones por mantenerse en la Primera División, visitando a Santiago Wanderers por la fecha 28 del Campeonato Nacional en el Elías Figuera Brander, en donde un triunfo significaba salir del fondo de la tabla de posiciones al sobrepasar a Deportes Iquique y Coquimbo Unido. Lamentablemente, una jornada que era esperanzadora se transformó en una verdadera pesadilla.

La primera clara del partido llegó a los 4’ por medio de Marco Medel, quien recibió completamente solo un balonazo largo al interior del área colocolina. Afortunadamente Brayan Cortés estuvo atento en el achique, ahogando de buena forma el grito de gol caturro.

Al Cacique le costó tener la pelota en el primer cuarto de hora de juego, donde Valdivia no lograba marcar diferencias y dejaba a la delantera desconectada. Marco Medel y Sebastián Ubilla eran los principales agentes de peligro para los locales.

Así llegó a los 16’ un penal a favor de Santiago Wanderers tras una torpe falta de Felipe Campos a Enzo Gutiérrez al tratar de despejar la pelota al interior del área chica. La acción la cambió por gol el mismo Gutiérrez a los 19’. Inicio complicado para el Cacique.

Colo Colo intentó equiparar las acciones, pero más allá de un par de centros no logró aproximarse mucho más al arco de Mauricio Viana. Por el contrario, Wanderers seguía dueño de la pelota y controlando el trámite del partido.

El baldazo de agua frío llegó a los 33’. Centro de Rotondi que encontró completamente solo a Marco Medel, quien con cabezazo mandó la pelota al fondo del arco de Cortés para anotar el 2-0 en el marcador. Duro golpe para los albos, pero que obedecía completamente a lo visto en la cancha del Elías Figueroa Brander.

Con 37’ otra vez se acercó peligrosamente Wanderers con un remate de Gutiérrez que rebotó en Campos. La pelota de volvió a quedar al atacante caturro, pero un valiente Suazo se tiró con todo frente al remate para evitar un nuevo tanto en contra. Colo Colo lo pasaba pésimo.

Recién en tiempo agregado llegó la primera clara para los albos tras una buena jugada colectiva que terminó en un centro de Suazo a la entrada del área chica que lamentablemente encontró a un pasado Costa, quien quedó incómodo para rematar. Los albos reclamaron un supuesto penal de Cerezo, pero el árbitro Christian Rojas ni la revisó.

Poco antes del final del primer tiempo le anularon un gol a Colo Colo por evidente offside. Así nos fuimos al entretiempo, con un Cacique cayendo por 2-0 y con más dudas que certezas a los camarines.

UN GOLPE DE REALIDAD

Iniciando la segunda mitad ingresó César Fuentes por Carlos Carmona, buscando algo de frescura en mediocampo del Cacique.

El trámite del partido inició tal cual como vimos en los primeros 45 minutos, con un Colo Colo que no lograba controlar la pelota y con Wanderers que generaba peligro por los costados, donde Campos y Rojas lo pasaban derechamente mal. Así llegó la primera clara para los caturros, con un centro de Medel y un cachetazo de Ubilla que mandó al tiro de esquina Brayan Cortés.

Con 53’ en el reloj llegó en tiro de gracia para el Cacique. Pase en profundidad a Medel, quien con un pase al centro del área conectó con Enzo Gutiérrez para que el atacante anotará su doblete y el 3-0 en el marcador. Un desastre.

A los 57’ Maxi Falcón se fue expulsado por una doble amarilla, dejando con uno menos a Colo Colo y sin su importante presencia para el próximo partido ante Everton de este domingo en el Monumental. Panorama complicadísimo para el Cacique.

Jorge Valdivia se vio obligado a dejar la cancha a los 62’ por Juan Manuel Insaurralde, todo en pos de ordenar un poco la defensa y evitar una catástrofe mayor. El regreso del Mago quedó con un aporte nulo para el equipo.

Esteba Paredes tuvo su vuelta a las canchas con 80’ en el reloj, reemplazando a Pablo Mouche en el ataque. A estas alturas tenía que estirar las piernas pensando en el desafío ante Everton del próximo domingo en el Monumental.

Una derrota dolorosa que se sintió como un golpe de realidad, no solo para estos jugadores, sino que también para los hinchas, quienes se habían ilusionado en los últimos encuentros de vivir un final de campeonato un poco más tranquilos. Ahora se viene Everton en el Monumental, en una nueva final para tratar de dejar esta triste imagen mostrada en Playa Ancha como un simple tropezón en medio del alza vista en los pasados duelos. Lo seguro es que, jugando así, la permanencia en primera es imposible.