Colo Colo dio el vamos a la fecha 30 del Campeonato Nacional 2020 ante Universidad de Concepción en el Ester Roa, en un duelo clave para sus aspiraciones de seguir ganando puntos que le permitan escapar de los puestos del descenso.
La primera clara del partido llegó por parte de los locales a los 7’ tras un grosero error de Brayan Cortés, quien recibió de Insaurralde y al momento de pasar la pelota fue interceptado por Matías Cabrera. Afortunadamente el portero albo arregló su error al despejar el remate rival y salvando el 1-0 en contra.
Al Cacique le costó generar fútbol en los primeros minutos de juego, donde sólo se contabilizó un disparo elevado de Gabriel Costa como opción de gol. El seleccionado peruano ingresó como el volante creativo del equipo.
A los 13’ llegó el primer remate directo de los albos por medio de Javier Parraguez, quien intentó con un remate de distancia que no tuvo problemas en contener el portero Guillermo Reyes.
Cecilio Waterman tuvo la apertura de la cuenta en sus pies a los 24’, ingresando al área y sacando un remate que Cortés estuvo brillante para rechazar tras un muy buen achique. Minutos más tarde intentó Carvallo de distancia, pero su remate se fue desviado. El Cacique se salvaba otra vez en el Ester Roa.
Colo Colo por fin se acercó al arco rival con 37’ en el reloj por medio de Javier Parraguez. El delantero remató un centro de Brayan Vejar que pasó cerca del palo derecho de Reyes. Lamentablemente esta llegada no se graficó en más presión al rival, llegando al final del primer tiempo con un discreto 0-0 en el Ester Roa.
Un punto trabajado
La segunda mitad inició con cambios para el Cacique, ya que ingresó en el ataque Pablo Mouche en reemplazo de Pablo Solari, quien mostró velocidad y coraje en el primer tiempo, pero no mucho más a la hora de generar peligro.
El inicio del complemente fue una pesadilla para el Cacique, ya que no logró controlar la pelota y tuvo que aguantar la presión alta de los locales. Así llegó la apertura de la cuenta a los 53’ por medio de Matías Cabrera, quien aprovechó los errores defensivos del Cacique (error en la salida de Rojas) para anotar el 1-0 en el marcador. Los albos otra vez debían nadar contra la corriente, como ha sido la costumbre en todo el año.
Colo Colo intentó responder al golpe, pero más allá de algunos centros y pelotazos al área del Campanil, no fue mucho el peligro que se generó en el arco de Guillermo Reyes. Con este panorama a los 60’ se realizaron dos cambios en Colo Colo: Ingresaron Felipe Campos e Iván Morales en reemplazo de Jeisson Rojas y Brayan Vejar. Minutos más tarde salió Carlos Carmona por Williams Alarcón.
Los cambios nos se tradujeron en un mejor juego en el Cacique, chocando constantemente contra la ordenada defensa del Campanil. Con 78’ en el reloj se produjo para dar algo de fuego en el ataque el último cambio albo, con el ingreso de Esteban Paredes por Javier Parraguez.
A los 81’ la U de Conce tuvo el 2-0 tras un cabezazo de Godoy que Cortés sacó prácticamente de la línea. La atajada del portero valió prácticamente un gol, sobre todo porque segundos más tarde el Cacique por fin dio con el gol por medio de Gabriel Costa, quien con un violento remate batió la resistencia de Godoy. Era el 1-1 en el marcador y quedaba mucho por jugar en el Ester Roa.
Cerca del final Brayan Cortés estuvo notable para ahogar el grito de gol de los locales al sacar de forma milagrosa un remate complicado que era el 2-1 en el marcador. Afortunadamente y considerando lo que vivimos en los últimos minutos, el empate no se movió más.
Una igualdad que se logró con mucho trabajo ante un rival que también lucha por mantener la categoría, pero con la diferencia de que está viviendo sus propios problemas en la ponderada. El Cacique ahora debe esperar el desarrollo de la fecha y de lo que hagan sus rivales directos en esta pelea. Ahora se viene la U en el Monumental, un Superclásico que como todos los años hay que ganar como sea, pero esta vez con un sentido de urgencia jamás vista en el Cacique. O los tres puntos se quedan en casa o la lucha por no bajar será más angustiosa que nunca.
