Corría la recta final del Campeonato Nacional 2024 cuando Carlos Palacios y varios jugadores de Colo Colo fueron llamados a la selección chilena. La alarma se prendió en Macul ya que debían jugar partidos pendientes claves en la lucha por el título sin algunos de sus titulares, sin embargo, la Joya pidió ser liberado de la convocatoria por problemas personales, previa conversación con el cuerpo técnico de Ricardo Gareca y desató una polémica de proporciones.
Es que, pese a que la salida del ahora jugador de Boca Juniors fue consensuada con el cuerpo técnico, para Pablo Milad, la situación fue unilateral y, por lo mismo, le impidió estar presente en el siguiente compromiso del Cacique en una decisión que estaba fuera de cualquier norma reglamentaria, tanto nacional como de la FIFA. La cuestión pasó, Palacios no pudo jugar y, finalmente, Colo Colo igual salió campeón del fútbol chileno.
La cuestión parecía olvidada, pero en la reciente fecha FIFA, ocurrió un hecho que volvió a recordar dicho episodio. Ricardo Gareca convocó a Fabián Hormazábal, defensa de la U y, antes de iniciar los entrenamientos, lo liberó por una lesión. El parte médico comunicó que la salida se debió “a que el cuerpo médico de su institución informó que el jugador presenta una lesión muscular cuya recuperación supera los plazos de la concentración respectiva”.
Un desgarro en el isquiotibial fue lo que sacó a Hormazábal de la convocatoria y, tal y como se mencionó, su recuperación excedía los tiempos de la concentración de la Roja. Sin embargo, ocurrió un milagro. Menos de 48 horas después del partido de Chile vs Ecuador, el lateral apareció como titular en el partido de la Universidad de Chile vs Everton, sin mostrar ninguna complicación física, haciendo levantar sospechas y dudas sobre la real magnitud de la lesión y la razón de su baja de la Roja.
Fabián Hormazábal fue baja de la Roja por lesión, pero fue titular en la U. | Imagen: Photosport.
Para Colo Colo aplica otro reglamento: ¿Qué pasó con Hormazábal en la Roja y en la U?
Y claro, viendo el parte médico que señala que “la recuperación supera los plazos de la concentración respectiva”, uno tiende a pensar que tampoco podría estar en los entrenamientos previos al compromiso con Ecuador y, por ende, recién podía volver a los trabajos el mismo martes que jugó Chile o, incluso, después.
Por lo mismo, el hecho de que haya jugado un día jueves, o sea, 48 horas después del compromiso con Ecuador, de titular y después de un desgarro, hace levantar las sospechas. Es que todo parece indicar que llevaba varios días entrenando con los titulares en su equipo y que, finalmente, sí pudo estar junto a la Roja en el Estadio Nacional.
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De todos modos, parece que en la ANFP no importaba mucho y, quizás, hay una razón de peso tras aquello. El pésimo momento que vive la selección chilena y lo movido que está todo en el entorno de Ricardo Gareca, no hacía conveniente sumar otro foco de conflicto que, al final de cuentas, era innecesario tomando en consideración que había cosas más importantes a solucionar en el corto plazo.
