A fines de 2018, Colo Colo presentó a su nuevo entrenador para reemplazar a Héctor Tapia en la banca alba: Mario Salas. El Comandante llegó tras un exitoso paso en el Sporting Cristal de Perú, donde salió campeón con un jugador que llegó con él a Macul como Gabriel Costa.
En el poco más de un año a cargo del primer equipo, sólo consiguió una Copa Chile y una clasificación a Copa Libertadores tras terminar segundo detras de la UC en el torneo nacional del 2019.
Pero junto a su salida por el mal arranque del fatídico campeonato 2020, queda el recuerdo de la polémica salida de Agustín Orión, portero argentino que habría tenido una discusión con Salas por haberlo marginado. Tras eso, el portero se despidió del club, y fue respaldado en conferencia de prensa por jugadores como Esteban Paredes, Matías Zaldivia, Jorge Valdivia, Pablo Mouche, Juan Manuel Insaurralde y Carlos Carmona.
Sobre sus inconvenientes que tuvo en su etapa en Macul, Mario Salas entregó su autocrítica en el programa ESPN F90: “Fue un gusto para mí dirigir a jugadores como Jorge [Valdivia], como Esteban [Paredes], como Julio Barroso, pero en general lógicamente hubo cosas en que yo a lo mejor podría haber manejado de otra forma“.
“Pese a que ya pasó hace mucho tiempo, a mí me sirvió mucho vivir eso porque cuando llegue otro momento similar a ese, yo voy a estar preparado de otra forma”, complementó el actual entrenador de Magallanes.
El periodo de aprendizaje en Colo Colo
Consultado sobre por qué no le fue como lo esperado, tras sus positivos pasos en Sporting Cristal y Universidad Católica, Salas respondió que “no a todo el mundo le va bien siempre. Yo siento que nadie es exitoso siempre en lo que hace“.
“En Colo Colo sin duda fueron momentos difíciles, y otros momentos muy gratos. Yo me quedo con que la etapa de Colo Colo fue un periodo de aprendizaje notable para mí“, cerró.