La grandeza de Colo Colo se explica por diversos factores. Historia, títulos, popularidad, ídolos, son solo algunos de los puntos que han forjado el nombre del club más importante de Chile. Además de los ya mencionados, la poderosa cantera con la que ha contado el elenco Popular, lo ha diferenciado de sus adversarios en lo que tiene que ver con el fútbol formativo.

Pese a lo anterior, durante algunos periodos, el club ha tenido diferentes complejidades en la materia de trabajo en divisiones menores y la promoción de canteranos en el primer equipo. Ahora bien, esta situación ha ido cambiando desde hace ya algunos años.

Hoy en día, la plantilla del Eterno Campeón, cuenta con numerosos valores formados en la cantera de Macul. Jeyson Rojas, Bruno Gutiérrez, Daniel Gutiérrez, Esteban Pavez, Vicente Pizarro, Damián Pizarro, Leandro Hernández, Lucas Soto y Dylan Portilla, son algunos nombres que hoy en día dicen presente en el primer equipo del Popular. Todos, en diferentes momentos, vivieron el proceso de ser juveniles, hasta dar el gran salto.

Ariel Paolorossi, se desempeña como jefe de las divisiones menores del club. En febrero del año 2019 arribó al club, con más de 23 años de experiencia en la materia y fue el señalado, para comandar un nuevo proyecto para el club. Casi cuatro años más tarde, se comienzan a ver los frutos de su trabajo.

El gran cambio en el fútbol formativo de Colo Colo

En conversación exclusiva con DaleAlbo, Paolorossi se refirió al trabajo que se ha realizado en el fútbol formativo del club. “Cuando llegué a Chile el déficit mayor que vi era la parte física y el poco volumen de entrenamiento que tenían los chicos. Y no sólo con la proyección, eso quiero que quede claro, que Eduardo por ahí habló de la serie, pero acá hay una metodología de trabajo de la 15 a la Proyección y de la 11 a la 14, divida en dos etapas, el fútbol infantil y el fútbol juvenil”, comenzó declarando.

Uno de los puntos que más se ha trabajado desde su llegada, tiene que ver con la parte física. “Nosotros en el fútbol juvenil, que es de la 15 a la proyección el volumen de entrenamiento es muy alto, nosotros estamos entrenando entre 2,5 a 3 horas en campo porque yo considero que el futbolista chileno es un futbolista con muy buena técnica, entiende bien los conceptos, pero físicamente le faltaba, así que ahí apuntamos desde mi llegada a eso”, comentó.

Respecto al nivel competitivo con el que cuentan los juveniles Albos, Paolorossi entregó una interesante revelación. “Nosotros los días miércoles o los jueves armamos partidos amistosos con Barnechea, Lautaro de Buin con equipos que podamos jugar con gente adulta para suplir la famosa reserva que no hay acá. Entonces, con eso estamos equiparado las fuerzas para que el chico no llegue tan débil al primer equipo. Lo que vemos y nos pone contento es que cada chico que a Gustavo le gustaba cómo jugaba se queda, no baja a las inferiores, esa es la metodología que quise hacer después de pandemia y costó, porque cuesta encontrar los amistosos, pero este año lo logramos y la verdad dio muchos resultados, detalló.

De esta manera, Ariel Paolorossi comenta el importante trabajo que se ha realizado en el Cacique en las divisiones menores. Cuando llegó al club, mucho se comentó del proyecto que buscaba tener a un 60% del plantel con jugadores formados en casa, todo en miras al centenario del club.