Es costumbre en algunos equipos argentinos que el técnico o los dirigentes premien al plantel con un automóvil “nuevecito de paquete” si son campeones a fin de año.
Ayer el técnico de Audax, Omar Labruna dijo que si sus dirigidos son campeones este año, regalará un auto para sortear entre sus jugadores.
Inmediatamente después Rodrigo Millar “agarró papa” y dijo que le pedirán un Porsche a Cagna si son campeones.
Hoy el DT albo se enteró, abrió los ojos y se rió, “no, no soy de estimular de esa forma, aunque alguna vez lo hice, como en Tigre cuando logramos el ascenso”.
Luego se sorprendió al saber el pedido del hombre de Arauco, “¿qué, el “Chino” quiere un Porsche?, jaja, si salen campeones… de la Libertadores”.
Bonito desafío.
