Rafael Caroca está triste. Ayer sufrió su tercera roja del campeonato tras entrarle con una patada en el pecho a Cristián Reynero.

“Estoy destrozado, pido disculpas, no fue mi intención, no soy mala leche. Me da pena, rabia, impotencia. Le fallé al cuerpo técnico, a mi familia, a mis compañeros y a los hinchas.
Estamos sufriendo por este momento, tenemos que ganar. No hicimos un mal partido pero sólo puedo pedir disculpas”, manifestó arrepentido el volante en diálogo con ADN Radio.

Del rendimiento, para cerrar manifestó que “nos falta la puntada final. Hemos buscado, tenemos que seguir. Demostramos buen juego pero no alcanzó y tenemos que hacer los goles”.