El 5 de octubre del 2019 es una fecha que quedó grabada en la historia del fútbol chileno y en especial, en Esteban Efraín Paredes Quintanilla. Es que aquel día, el por entonces capitán de Colo Colo convertía el 2-1 parcial ante Universidad de Chile y se transformó en el máximo goleador del fútbol chileno al convertir su tanto 216 con lo que superó el registro que ostentaba Francisco “Chamaco” Valdés.

Fue una tarde de sábado en un partido correspondiente a la fecha 23 del Campeonato Nacional donde a los 65 minutos, donde tras recibir un pase de Pablo Mouche, Paredes con un toque sutil a la entrada del área chica venció al arquero universitario Fernando de Paul y desató la locura en el Monumental, ya que era el 2-1 parcial en la victoria por 3-2 que consiguió el Eterno Campeón en el Superclásico.

El festejo fue lleno de emociones. Pareces primero lo celebró junto a todo el plantel de Colo Colo y luego fue hacía el sector de Cordillera donde lo esperaban sus hijos, Esteban y Vicente, con quienes se fundió en un emotivo abrazo en el césped del Monumental.

Minutos más tarde, el “Tanque” y a esa altura, máximo goleador del fútbol chileno, fue reemplazado y vio desde la banca como Julio Barroso anotaba a los 95′ el gol del triunfo ante el clásico rival y luego, vino la fiesta en el Monumental.

Paredes recibió un botín de Oro, salieron a relucir las poleras con el número “216”, un video emotivo donde “Chamaco” Valdés le hablaba a Paredes y se llevó el balón del gol y un pedazo de red del arco sur del Monumental, lugar donde fue el histórico tanto.

Dos años han pasado de aquella hermosa jornada, donde Paredes inscribió su nombre en lo más alto y se convirtió en leyenda del fútbol chileno.

Paredes festejó junto a sus hijos. (Foto: Agencia Uno)