Colo Colo en la revancha ante Universitario jugó bien y ganó bien. Quizás si hubiera sido una llave ante un rival de renombre, estamos todos de pie aplaudiendo. El problema es precisamente ése: la alcurnia del rival sin querer mirar en menos a nadie.

Y es que quedar fuera de la Copa Sudamericana en primera ronda ante un equipo boliviano que está de la mitad de la tabla para abajo en su torneo es, a todas luces, un fracaso, más allá de que hoy el equipo, no cabe duda, se jugó por entero y ganó bien, jugando bien.

“Da mucha bronca pero bueno esto es así. Ellos ni llegaron, fue un puntazo de fuera del área y nos hicieron el gol cuando habíamos logrado convertir. Hubiera sido todo más simple. Terminaron empatando de pura suerte pero el fútbol tiene estas cosas”, comenzó diciendo Diego Cagna en conferencia de prensa tras la derrota.

Luego, el DT agregó que “el equipo jugó para adelante, jugó bien, llevamos por delante al rival, estuvimos a un pasito. Estamos con mucha bronca, pero se rescata que el equipo dejó todo”, añadiendo que “estamos mal. El camarín está golpeado. Con bronca, pero hay que seguir, no nos podemos quedar. Hay que seguir estando en el campeonato, mantener la punta y no podemos bajonearnos. Es un golpe fuerte, estamos tristes pero hay que levantarse para el fin de semana”.

Y siguió una clásica: “No hablo de fracaso, hicimos todo lo que teníamos que hacer, ellos tuvieron la suerte de meter ese gol. Luego entraron dos chicos más ofensivos, a veces estuvimos desordenados pero hicimos todo, no se les puede reprochar nada a los jugadores. Teníamos muchas ilusiones”, manifestó defendiéndose al decir que “dije que teníamos que pelear, no que fuéramos a ganar (la Copa). Nos queda una competencia en la que vamos primeros”.

¿Pesó el tema de las ausencias? “No hay que buscar excusas. Las lesiones y esas cosas pueden pasar. Teníamos un buen equipo, fuimos superiores y hoy no nos alcanzó. La diferencia estuvo allá con esos errores que nos complicaron”, comentó.

Como es clásico en un equipo grande (y erróneo casi siempre porque se corta el hilo por lo más delgado y se esconde la basura debajo de la alfombra), se le consultó si ha pensando en dar un paso al costado: “No. Excepto que sea un desastre jamás me voy a ir. Vamos a seguir luchándola y hay que meterle con todo en el Campeonato. Estamos para luchar y seguir trabajando”, disparó con fuerza el adiestrador.

Al ser consultado por los dichos ya reiterativos de que se “va a armar un equipo para pelear internacionalmente”, Cagna se desmarcó diciendo que “yo no sé otros pero yo no prometo porque esto es fútbol, el deporte más raro del mundo. Sí trabajo, estamos tristes, le pido perdón a la gente por esto pero personalmente no prometí nada”.

Para cerrar, y tras decir que puede formar hasta con tres delanteros en el futuro pero que irá viéndolo y que sólo puede hablar de esta eliminación ya que en la Libertadores no estaba, el “Flaco” espetó que a este traspié “no le buscaría una calificación, si ustedes (la prensa) quieren decir fracaso díganlo, yo no. Creo que los jugadores van a poder dormir tranquilos, pueden tener un día de duelo pero después deben seguir metiéndole. Estamos preparados para luchar contra cualquiera”.