Este viernes será clave en el futuro de Harold Mayne-Nicholls, ya que el directorio realizará una sesión extraordinaria para aprobar el puesto de vicepresidente ejecutivo y su remuneración por el cargo.
Hubo total respaldo en torno al ex presidente de la ANFPy en aquella sesión, algunos directores solicitaron presentar ideas para reasignar sus roles y que estos no se superpongan con los de Marcelo Espina.
Sobre ese punto,Carlos Cortés, uno de los directores de Blanco y Negro, dialogó con La Tercera y contó detalles de la votación. “Hubo una entrega de un organigrama de las labores que pudiese cumplir una vicepresidencia ejecutiva. Nosotros lo estudiamos en conjunto y llegamos a la conclusión de que se sobreponían ciertas funciones al directorio, a la gerencia general y a la gerencia deportiva liderada por Marcelo Espina”, relató el abogado.
“Desde junio de 2018, con la unanimidad de todos los miembros del directorio de la época, incluida la Corporación, se decidió darle a la gerencia deportiva una autonomía en todos los temas deportivos. Es importante que esa institucionalidad se mantenga. Si tenemos a una persona relevante, porque claramente Haroldes una persona que sabe de fútbol y que tiene una trayectoria, hay que tratar de que cumpla las mejores funciones que sean útiles para el club”, complementó.
Para Cortés, esa autonomía de la gerencia deportiva pasa por todas las que tengan relación a los proyectos del primer equipo o las divisiones menores. “Esa es la institucionalidad que tiene Colo Colo y así funcionan todos los clubes grandes. Por tanto, ningún director puede pasar por encima de la institucionalidad de Colo Colo”, enfatizó.
De todos modos, el abogado aseguró que el puesto de Harold Mayne-Nicholls no corre peligro, ya que el es vicepresidente por votación de los directores y reitera que lo único que resta definir es cuáles serán sus funciones específicas dentro del club.