Con 40 años Esteban Paredes sigue marcando pauta en el fútbol chileno sobre lo que debe hacer un delantero, corriendo bien la cancha, estar en el momento preciso y claro, un poder de fuego que ya se lo quisieran varios atacantes de nuestro balompié.

Tras convertirle a la U en el último superclásico y de cara a una extenuante semana en el Cacique, ahora se viene la recuperación, esa que a los 40 años se hace un poco más difícil todos los días, pero que cumple a cabalidad por amor a este juego.

“A los 20 jugaba todos los días y no me dolía nada, ahora es diferente, ajajaj. Es difícil la recuperación, porque no te recuperas ni en un día ni en dos. Recién al tercer día estoy recuperado y con ganas de entrenar. Antes cuando tenía 20 o 25 años, jugaba un partido y al otro día podía entrenar de la misma forma. Ahora me tengo que cuidar la alimentación que es fundamental, mucha agua”, afirmó Esteban en conversación con LUN.

Un gol que quedará en la historia de nuestro fútbol. | Foto: Agencia UNO

En ese sentido sostuvo que “yo he sido un tipo que a lo largo de mi carrera siempre me ha gustado entrenar y trato de perderme los menos entrenamientos posibles, porque eso me ha llevado a los 40 años aguantar 70 minutos en la cancha”.

Al ser consultado sobre el nivel de potencia de este trabajo, el ídolo albo cerró que “terrible, pero me gusta mucho. El fútbol se vive muy intensamente”.

El gol a la U a sus 40 años significa mucho para la carrera de Esteban Paredes: Fue el 16 en Superclásicos, el 218 en Primera División y el 196 con la camiseta alba.