Esteban Paredes fue una de las figuras rutilantes del Superclásico 187 entre Colo Colo y Universidad de Chile en el Estadio Nacional, anotando un gol que a sus 40 años significa mucho para su carrera: Fue el 16 en Superclásicos, el 218 en Primera División y el 196 con la camiseta alba.

En conversación con LUN el goleador del Cacique entregó detalles de como fue su tarde tras la igualdad ante los azules, donde afirmó que se tuvo que dar un baño con hielo durante unos 10 minutos y que almorzó a lo grande con su familia.

“Tengo aquí la tina y me meto unos 10 minutos con huelo. Después comer bien, descansar y mañana (lunes), volver a entrenar, hacer un regenerativo y ya el martes hacer más movilidad, algo más cortito y más rápido, para llegar bien el miércoles al partido. Ahora recién voy a comer un rico lomo con ensalada”, afirmó el ídolo albo.

A la hora de analizar su rendimiento, el 7 albo afirmó que “estoy feliz y orgulloso de volver a marcar en un clásico a los 40 años, porque a esta edad no es fácil, tienes que mantenerte de buena forma”.

“Igual no se ganó, pero hay una felicidad mía porque llego así a esta edad jugando un clásico, que no es menor. Uno siempre quiere que el equipo gane y ande bien”, concluyó el capitán albo.

 

Ahora Esteban debe prepararse para una extenuante semana donde el Cacique recibirá a O’Higgins y visitará a Unión La Calera, aunque claro, es de esperar que Gualberto Jara cumpla su palabra de rotar el equipo y le de algo de descanso al único delantero que de momento le ha rendido en esta vuelta al fútbol.