No lo pasó bien Aníbal Mosa en Quillota. El empresario llegó acompañando al equipo como se le puede ver a diario en el Estadio Monumental y se instaló, camiseta puesta, en la tribuna preferencial del Lucio Fariña Fernández.
Pero cerca había varios hinchas de Colo Colo que advirtieron su presencia y comenzaron a increparlo. Los gritos comenzaron a subir de tono, Mosa no se inmutaba pero luego le lanzaron vasos de bebida y otros proyectiles.
Tras esto, se tuvo que “refugiar” y buscar una nueva ubicación para poder observar el 0-0 del Cacique ante Santiago Wanderers.
Foto: Agencia UNO