Carlos Muñoz dialogó hoy con Víctor Cruces de ADN Radio Chile y comentó su actual momento, que lo tiene en la banca y fuera de las nóminas en algunos partidos.

El porteño expuso que “por supuesto que uno se pone a pensar, analizar, la gente te para en la calle, te pregunta por qué no juegas, ustedes mismos que están con esa duda de por qué no he tenido acción en los últimos partidos y el más preocupado soy yo, porque el año pasado, a pesar de que como grupo no se cumplieron los objetivos que teníamos, terminé haciendo un campeonato bastante correcto. Pensé que este año iba a comenzar de otra forma, pensé ser titular definitivamente acá en Colo Colo, tener la regularidad y la confianza que necesitaba”.

De todas formas, fue enfático en decir que “tengo que seguir trabajando, demostrarle al profesor en cada entrenamiento que puedo ser un aporte para el equipo. Que en definitiva pueda confiar en mí, que me de la confianza que necesito para poder demostrar mis condiciones”.

Pese a que acata, cree que no debió ser “crucificado” por una mala tarde. “Jugué con Iquique, por ahí en una posición donde no me acomodaba mucho y la verdad no había entrenado en la semana. Sólo se me dijo una hora antes que iba a jugar y en esa posición, entonces igual a uno lo pilla de sorpresa y no preparado para hacerlo pero uno como trabajador de esto, como profesional que es tiene que afrontar la situación. No se me vio bien y quizás eso fue lo que me llevó el otro partido al banco, después a no ser citado pero es ahí donde uno necesita esa confianza. El cuerpo técnico sabe lo que yo puedo valer como jugador, lo que puedo rendir y por un partido malo no puedo quedar al margen hasta no ser considerado”, analizó.

También manifestó que “esto es cuestión de tiempo, de esperar a que se me de la posibilidad nuevamente. Tengo que estar bien preparado porque así como la gente espera que vuelva a jugar, yo tengo que responderles dentro de la cancha”.

¿Ha hablado con Basay el tema? “No soy un jugador de pedir explicaciones. Trato de mantener una relación sumamente profesional porque a veces acercándose mucho al técnico se pueden malinterpretar las cosas, es mejor siempre tener la distancia esa de técnico-jugador. Si no cuenta conmigo él tendrá sus motivos y creerá que mis compañeros también lo pueden hacer mejor así que yo en ese sentido nunca voy a poner un problema ni nada, si no me toca estar sigo apoyando a mis compañeros, sigo tratando de dar todo de mí y bueno, vamos a ver que pasa de aquí en adelante”, tiró.

Finalmente, analizó al club de su vida, rival del domingo: “Será complicado, Wanderers ya está más que visto que viene mostrando un nivel futbolístico bastante bueno. Han sacado muy buenos resultados jugando en Playa Ancha. Enfrentamos a un gran rival pero nosotros tenemos que demostrar, alcanzar una regularidad que nos permita pelear en la parte de arriba de la tabla, sacarnos los fantasmas de jugar un partido bien y otro mal”, concluyó.