El jueves Chile cayó por 2-1 contra Uruguay tras un grotesco error de Eber Aquino en el Estadio Centenario. El paraguayo, cuando el partido entraba en los minutos finales, decidió no cobrar una clara mano a favor de Chile.

Sebastián Coates puso su mano tras un centro de Víctor Dávila, cuya jugada no fue revisada. El juez se dejó llevar por su staff en el VAR y decidió hacerles caso en esta decisión.

Hoy, dos días después del partido y la polémica, la Conmebol decidió liberar el ansiado audio entre los árbitros paraguayos para no determinar la pena máxima para Uruguay en los minutos finales.

“Para mi pega en la mano pero la tiene recogida”, esas fueron las primeras palabras de Eber Aquino, el juez central, quien inmediatamente se apoyó en sus asistentes del VAR.

La mano de la discordia

Para finalizar, sus asistentes fueron los que decidieron no cobrar mano. “Quiero ver el punto de contacto. Yo veo que el brazo está en posición natural. A ver, otra más. El punto de contacto está en posición natura. Para mi no amplia el volumen del cuerpo”, expresaron.