Colo Colo volvió a caer en el norte, esta vez en Iquique ante el rival que aproechó dos errores claves en la marca para abrochar un partido que en términos generales fue bastante parejo para los dos.
La imprecisión en el finiquito le terminó pasando la cuenta a un Colo Colo que tuvo al menos dos “claras-claras” en los pies de Muñoz que sigue sin anotar.
Por su parte, los celestes aprovecharon un error de comunicación entre Mena y Lobos que costó la apertura y tres minutos más tarde el Rengo alargó con un zapatazo que pilló a un Lobos muy mal parado.
El partido
Empezó bien el Cacique, a los cinco minutos, Vecchio gana línea de fondo, saca el centro y Muñoz se lo pierde solo abajo del arco y en la contra viene la respuesta de Iquique, cabezazo de Villalobos y Lobos que se despacha un tapadón para mandar al corner.
De ahí en más, el local tomó el ritmo del partido, el cuarteto de ataque formado por el Rengo Díaz, Edson Puch, Manuel Villalobos y Leonardo Monje tuvo a la zaga de cabeza, sobre todo a Mirko Opazo que sólo le vio el número al que se cargaba por ese lado.
Por el centro tampoco se vio presión, Pavez corrió siempre contra su arco superado por Saravia y Díaz, mientras que De La Fuente tampoco estuvo en su mejor tarde, propiciando jugadas de riesgo como el zapatazo del “Rengo” a los 31’.
Tres minutos más tarde, Puch le sacó la espalda por enésima vez y solo frente a Lobos la apura de “puntete” y un manotazo salvador de Lobos evitó el gol.
¿Y Colo Colo?, bien gracias. De cuando en vez se asomaba por el arco de Naranjo, con un tiro de media distancia de Olivi que el portero se complicó más de la cuenta y un cabezazo de Vilches al segundo palo que poco inquietó a Los Dragones.
La más clara vino sobre el final con una genialidad de Vecchio que dejó mano a mano con el arquero a Muñoz y Carlos increíblemente elevó cuando todo el pueblo albo celebraba.
La última fue un penal no sancionado, Olivi cae dentro del área producto del roce y en eso llega Brito para darle un pisotón ordinario en el muslo, Polic muy tapado no lo vio y al descanso.
Los errores cuestan caro
En el arranque del segundo tiempo se juntan los tres atacantes, Olivi para Muñoz, Carlos que aguanta y el Chapa remata al primer palo para el lucimiento de Naranjo.
A los 53’ vino el error garrafal, una pelota que caía mansa para Lobos que grita el clásico “mía”, Mena que se cruza, revienta y se la deja servida a un rival que saca el centro que conecta medio pifiado Villalobos y se mete dando botecitos ante la estéril patada desesperada del propio Mena.
Tres minutos más tarde, Rodrigo Díaz recibe solo en mitad de cancha, sin la presencia de De La Fuenta ni Pavez que lo apuraran, la paró, se acomodó, se tomó un café y la clavó al palo de Lobos que estaba mal parado y sólo la miró.
Ahí vino la respuesta desde el banco, entraron Flores por Fuenzalida y Martínez por Olivi que con más ganas le cambiaron la cara al ataque. De hecho, Gerson tuvo una a la primera que sacó Naranjo.ç
A los 74’ el mejor colocolino, Emiliano Vecchio es derribado dentro del área y como en el barrio, el que la hace la deshace y decreta el descuento que despertaba la ilusión.
De ahí en más, harto pelotazo, hartas ganas, poco fútbol que chocaban con las contras de Iquique que pudo aumentar gracias a una jugada en que Puch le gana la espalda a Mena, centra y Caracho Domínguez llega justo a cruzar.
Un marcador que deja a Colo Colo complicado, pues en un torneo sin playoffs no se pueden dar estas licencias de perder seis puntos en las primeras dos salidas.