Siguen los coletazos por la auditoría encargada por Leonidas Vial para que analizara todos los fichajes de la época de Guillermo Mackenna y Hernán Levy.
En el primero donde se habrían descubierto irregularidades sería en el de Osmar Molinas. El paraguayo dijo que sólo recibió US$ 100 mil pero, siendo jugador libre, en la Superintendencia de Valores y Seguros se informó que fueron cancelados US$ 550 mil por el 62,5% de su carta. La investigación, incluso, hablaría de US$ 900 mil “perdidos”, que no se sabe a qué manos fueron a parar.
Consultado por La Tercera, el ex gerente deportivo, Jaime Pizarro, admitió que recibió la “recomendación” del futbolista por parte del ex asesor Jorge Vergara Núñez.
“Él, como muchas personas, me habló de Osmar Molinas. Nos interesó porque era un volante de mucha proyección que tenía el pase en su poder, tras participar en la nómina inicial de Paraguay para la Copa América”, aseveró el Káiser.
Esto choca con la versión entregada por Vergara horas antes en ADN Radio Chile: “Oficialmente, nunca he recomendado a nadie, sólo di mi opinión por Twitter (@liberenalindio). Lo grave aquí es que se pagó un millón de dólares por un jugador libre, situación que fue visada por la comisión de fútbol”, manifestó.
El capitán de Colo Colo 91, para cerrar, añadió al matutino que “la negociación por Molinas estuvo a cargo de su representante, Jorge Ciarlone, y del propio jugador. Ellos firmaron un contrato que establecía claramente los montos que se pagaron en la transacción, la forma de pago y los derechos que adquiría el club. En ningún momento participaron otros agentes, como Mariano Gastó u otro que no haya sido mencionado”.
El tema no parece que parará acá…
