Días turbulentos se han vivido en el Monumental últimamente: jugadores investigados por licencias de conducir falsas, duros mensajes a través de la prensa entre el presidente del CSD Colo Colo Matías Camacho y el ex DT Gustavo Quinteros, y una dirigencia de Blanco y Negro que no tiene nombres avanzados como nuevo entrenador.
Pero estos problemas no se comparan a lo ocurrido hace 21 años, donde en enero de 2022 se declaró al Club Social y Deportivo Colo Colo en bancarrota, con serio riesgo de desaparecer. Una millonaria deuda obligó a que un plantel muy joven, liderado por históricos del Cacique, jueguen por amor a la camiseta.
Un día como hoy 22 de diciembre del 2002 esos jóvenes futbolistas fueron protagonistas de una de las gestas inolvidables en la historia de Colo Colo: ser campeón en la quiebra. Si bien fue la estrella 23 de las 33 que tiene el Popular en torneos nacionales, es una que quedó grabada a fuego en su historia.
Con el histórico Jaime Pizarro como entrenador, los Albos se quedaron con el título del Clausura 2002 tras superar en las finales de los play-off al actual campeón Universidad Católica, dando la vuelta olímpica en el Estadio Nacional.
El inolvidable título de Colo Colo en la quiebra
Aquel 2002 los jugadores de Colo Colo realizaban amistosos para generar ingresos, tanto para la subsistencia del plantel como para gastos necesarios como la luz o el agua. Se vivía en el Monumental una crisis tremenda, con una deuda cercana a los 30 millones de dólares.
Desde la cantera colocolina tuvieron que afrontar la responsabilidad de ser titulares en el primer equipo, que tenía en sus últimos años de carrera a los capitanes Marcelo Pablo Barticciotto y Marcelo Fabián Espina.
¿Es la estrella 23 obtenida en la quiebra la más importante de Colo Colo a nivel nacional?
¿Es la estrella 23 obtenida en la quiebra la más importante de Colo Colo a nivel nacional?
YA VOTARON 78 PERSONAS
Tras meterse en play-off del Clausura 2002, Colo Colo superó en sextos de final a Unión Española, a Cobresal en cuartos de final y a Cobreloa en la semifinal. Su último desafío era la UC, actual monarca.
En el Monumental con 40 mil espectadores los Albos dieron el primer golpe y ganaron 2-0, gracias a los goles de Marcelo Espina y del canterano Ignacio Quinteros. La vuelta el 22 de diciembre en el Estadio Nacional, con 50 mil personas en las tribunas, el Cacique se quedaría con el título al ganar 3-2, con un tanto de Espina y un doblete del goleador del torneo Manuel Neira.
Eduardo Lobos al arco; Luis Mena, David Henríquez y Miguel Aceval en defensa; Marcos Millape, Braulio Leal, Raúl Muñoz, Rodolfo Madrid y Marcelo Espina en el mediocampo; Luis Ignacio Quinteros y Manuel Neira en delantera fue la formación titular de aquella inolvidable final.