Sacar a Marcelo Espina de Colo Colo le costaría 160 mil dólares a Blanco y Negro

No cabe duda de que Marcelo Espina es uno de los grandes responsables del pésimo momento que esta viviendo Colo Colo deportivamente hablando, graficado de forma perfecta tras la caída ante Jorge Wilstermann por la Copa Libertadores 2020 y la eliminación definitiva del certamen internacional.

El gerente deportivo está enfrentado sus primeras críticas por parte del medio, lo que hace que su futuro esté en juego en el corto plazo en el Monumental, sobre todo también al ver la delicada posición que está ocupando el Cacique en el Campeonato Nacional, donde marcha penúltimo coqueteando con el descenso.

Ante eso ya se está hablando de números al interior de Blanco y Negro, analizando el tremendo costo económico que traería una hipotética desvinculación del cargo antes que su contrato expire en junio de 2021.

“Su acuerdo fue por 20 mil dólares mensuales más auto y casa, porque estaba viviendo en Argentina. Difícilmente va a renunciar. Y echarlo nos significa un desembolso de aproximadamente, 160 mil dólares. Plata que, por cierto, no tenemos”, señaló un miembro del directorio de Blanco y Negro a El Mercurio.

Cabe recordar que Marcelo Espina arribó al Cacique a mediados del 2018 de la mano de Gabriel Ruiz-Tagle como presidente de Blanco y Negro, quien ya no está en el cargo tras su salida meses más tarde en el 2019 con el regreso de Aníbal Mosa al liderazgo de la concesionaria.

Las culpas de Espina

Marcelo Espina ha traído la importante suma de 17 refuerzos al Cacique desde su llegada en el 2018, donde solo unos pocos “salvaron” la inversión en desmedro de la gran cantidad de jugadores que terminaron en deuda en el primer equipo.

Con él como gerente deportivo se han sentado tres entrenadores en el banco de Colo Colo: Mario Salas, Gualberto Jara y Gustavo Quinteros. Lo de Salas terminó en una abrupta salida a comienzos de este año, Jara fue un discretísimo interino y hay que ver todavía como Quinterors levanta este buque.

Deportivamente los números tampoco son buenos, ya que el 2018 se terminó séptimo en el Campeonato Nacional y solo se rescata los cuartos de final de la Copa Libertadores.

En el 2019 el panorama no mejoró del todo, alcanzando apenas para ser segundos a 13 puntos del campeón Universidad Católica y siendo eliminados tempranamente en Copa Sudamericana a manos de la UC de Ecuador.

El 2020 parecía empezar bien al ganar la Copa Chile ante la U en Temuco, pero rápidamente la crisis se tomó el club con el despido de Mario Salas por malos resultados y un interinato poco serio de Gualberto Jara que nos dejó afuera de la Copa Libertadores y por ahora penúltimos en el Campeonato Nacional.