El 2025 de Colo Colo fue calamitoso. Sin títulos, sin clasificación a copas internacionales y una Copa Libertadores para el olvido, condujeron a un año en el cual, las únicas alegrías llegaron por parte del plantel femenino. En el masculino, la cosa fue de mal en peor y, por lo mismo, el conjunto de Fernando Ortiz necesita un golpe de timón importante.

El Tano iniciará la temporada con el Cacique tras su llegada a mitad del segundo semestre del año y tiene varias taras para poder levantar el nivel. Él mismo necesita una revisión en cómo trabajar. Si bien no se puede achacar todo el fracaso a su dirección técnica, lo cierto es que falló en momentos importantes, como la hora de cerrar la clasificación a la Copa Sudamericana o la fea derrota ante la U por la Supercopa.

Ahora no tiene excusas. Con un plantel que se armará según sus peticiones y un tiempo de trabajo que será extenso, el Popular debe recuperar su jerarquía y animar, al menos, dos de los tres torneos que jugará en el año que entra. De esta manera, el entrenador tiene harta pega y, por lo mismo, hay algunos jugadores que pueden salir beneficiados con este nuevo aire que tendrá el plantel de cara al 2026.

Así, la temporada que viene puede ser un año de segundas oportunidades para varios futbolistas que esbozaron algo distinto. Por ejemplo, el caso de Víctor Felipe Méndez. En la etapa final de la temporada se ganó una camiseta de titular y, ahora, será su gran oportunidad para adueñarse del mediocampo y no tener discusión en su estelaridad junto a Vicente Pizarro. ¿El tercero en dicho puesto? Otro que tiene tarea, Tomás Alarcón. A pesar de tener buenos pasajes, nunca se terminó de consolidar, pero es cosa de tiempo para que le encuentre la mano al DT y sea el jugador que Colo Colo fue a buscar a principios del 2025.

Fernando Ortiz tiene mucha tarea en Colo Colo.

Las segundas oportunidades que tendrá Colo Colo en 2026

Uno que tiene que levantar su nivel a como dé lugar, es Claudio Aquino. El trasandino tuvo destellos de brillantez al inicio de la temporada, pero con el pasar de los meses, se fue apagando, llegando a ser casi intrascendente. Más allá de que las estadísticas dicen que es el jugador que más oportunidades de gol creó, lo cierto es que Colo Colo no lo aprovechó y terminó sucumbiendo con la presión y la frustración. Ahora, con un nuevo y renovado ciclo, debe reverdecer laureles.

Hay alguien que terminó, quizás, su peor año en Macul: Esteban Pavez. El capitán del Popular fue borrado hasta de las citaciones, pero no quiere partir. Su idea es luchar un puesto y pelear por ser considerado por Fernando Ortiz y, así, salir por la puerta ancha del club de sus amores. Tiene mucho en contra, pero está en él poder dar vuelta el partido y volver a ganarse la confianza del Tano y el cariño de la gente.

Por el mismo camino va Arturo Vidal. Con cierta polémica con el entrenador, el King fue quedando más atrás en la consideración del estratega y, ahora, buscará ser protagonista nuevamente en lo que puede ser su último año con la camiseta del Eterno Campeón. El trabajo y el enfoque serán claves para el que el bicampeón de América nos regale lo último de su repertorio.

Los casos especiales en Colo Colo

Uno que no pudo ver acción con Fernando Ortiz fue Alan Saldivia. Lesionado desde antes que llegara el Tano, el charrúa no pudo ser protagonista y sólo se mostró como alternativa en la parte final de la temporada, pero sin saltar a la cancha. Si bien su futuro en Macul es incierto, si es que se queda, puede llegar a ser importante para el DT.

Caso similar el de Francisco Marchant. Con un futuro prometedor, el canterano del Popular fue convocado al Mundial Sub 20 y volvió con una lesión en una de sus piernas que lo sacó del resto de la temporada. A pesar de que pudo ser visto algunos minutos y entrenamientos con el Tano, no volvió a ser la promesa que todos esperaban. Más maduro y con más minutos en cancha, puede ser un baluarte en el ataque del Cacique.

Hay mucha tarea. Fernando Ortiz deberá sacarle la mejor versión a los jugadores que dirija en Colo Colo durante el 2026 para poder volver a pelear el título y recuperar el sitial que corresponde a un club de esta envergadura. Cualquier paso en falso, puede significar su salida temprana a mitad de año, tiempo en que tiene una nueva revisión de rendimiento en su contrato.