Ivo Basay disparó con todo hoy en conferencia de prensa haciendo una fuerte autocrítica y un balance de lo que viene.
El Hueso manifestó que “contento no estoy. Enojado, obviamente, pero tampoco puedo llevar ese enojo a la cancha. Es una vergüenza y son de las cosas difíciles de llevar en la semana”.
De inmediato, enumeró hechos: “El resultado nuestro, la detención de la barra de Colo Colo por parte de las autoridades y, para los que somos pro animal, la matanza que hubo en San Joaquín, fueron tres cosas vergonzosas que me tocó vivir en ocho días. Hay muchas reflexiones y “mea culpa” que hacer. No hay que descartar nada”, sentenció.
Sobre las reuniones con el plantel, tiró que “yo puedo tener conversaciones con cada uno, pero si no tenemos respuesta ahí, las charlas no sirven de nada. Van a haber modificaciones. Todos asimilamos lo fuerte que ha sido la derrota. Creo que siempre se puede perder, pero no en la forma que lo hicimos. Una manera que nadie le gusta”.
El miércoles, Hernán Levy dijo que no está conforme con una o dos incorporaciones, pero Basay destacó que esa labor es de él: “No voy a hacer evaluaciones de los refuerzos, éstas se harán a fin de año. No corresponden ahora, hay muchos caminos por recorrer”.
Muchos insultos se han escuchado por estos días ante lo cual el adiestrador espetó que “estamos acostumbrado a este tipo de cosas y en algún momento son merecidos para todos”.
Finalmente, tiró sobre el duelo del 30 de octubre ante el cual Levy aseguró que “no se le podía pedir” al cuerpo técnico los tres puntos, que “un clásico se sale a ganar. Ningún hincha va a decir que no quiere ganarlo. Pasa por un tema de orgullo, de necesidad y estamos en casa, sería ridículo pensar en que no es exigencia ganar ese partido. Pero no quiero pensar en eso ahora, nos queda Santiago Morning y creo que es mucho más importante en estos momentos”, agregando que “si no fuera por la posición en que estamos en la tabla, esto sería aún más grave”.