Y las realidades deportivas están en la mesa. Ese fue uno de los requisitos que Aníbal Mosa, presidente de Blanco y Negro, quería en el papel a la hora de analizar el proceso de Mario Salas como entrenador de Colo Colo.
Las cuatro derrotas al hilo y los 12 puntos de distancia con el líder Universidad Católica son un dato demoledor a la hora de estudiar este año del Comandante con el buzo de estratega en el Monumental.
“Los respaldos son absolutos mientras existen, después dejan de ser absolutos. Nos gusta mantener procesos, pero las realidades deportivas tienen que estar arriba de la mesa”, afirmó el mismo Mosa hace unos días, como presagiando sin querer lo que vivirá la directiva de la concesionaria en las próximas horas.
La Copa Chile ganando hace poco más de un mes ya es pasado y el presente es alarmante para los hinchas de Colo Colo, quienes quieren decisiones y rápidas de Blanco y Negro en torno al futuro de Mario Salas en la institución.
Las realidades deportivas, esas que dicen que el Cacique está mostrando una calidad de juego bajísima, que cumplió cuatro partidos perdidos en fila y los largos 12 puntos de distancia con la UC, están a la vista de todos. Ahora la decisión está en Mosa y compañía.