En 2006, Andrés González vistió la camiseta de Colo Colo con éxito. Ganó el Apertura y el Clausura de ese año, pero no se pudo quedar porque el Cacique no ejerció su opción de compra que llegaba al millón de dólares en ese entonces.

Después regresó a América de Cali, pasó por Santa Fe y Junior obteniendo más campeonatos y hasta llegó a la selección Colombia, pero hace tres años tomó una decisión drástica.

Mientras jugaba en Perú, y con sólo 31 años, el zaguero decidió poner fin a su carrera: su hija, Julieta, nació con una parálisis cerebral y prefirió estar con ella y su señora, Alexa Gómez, para sacar adelante a su familia.

Hoy busca fondos para costear el tratamiento de la pequeña, aprovechando los contactos que hizo a través de sus 15 años de carrera que se vieron interrumpidos. ¡Mucha fuerza!