El 5 de octubre de 2019 es una fecha que significa mucho en la vida de Esteban Paredes y, también, en la de los hinchas de Colo Colo. Aquel día, los Albos recibían a Universidad de Chile en una nueva versión del Superclásico chileno que, además, tenía un condimento bastante especial.

Semanas atrás, el Tanque había convertido su gol 215 ante Palestino en La Cisterna y daba caza a Francisco Chamaco Valdés como el mayor goleador en la historia de torneos de Primera División, por lo que la tarea era marcar el 216. Mucho se esperó el momento, de hecho, hubo una celebración frustrada en un partido ante Cobresal. Hasta que llegó el día. Como una historia sacada del mejor de los libros, el Cacique recibió a los azules en un Monumental repleto con la expectación de que Paredes marcara un gol.

El Popular comenzó perdiendo ese partido por un penal ejecutado por Gonzalo Espinoza, tras una mano de Iván Rossi en el área. Gabriel Suazo empató todo con un tremendo golazo en los 56 minutos y, en el 65’, la fiesta se desataría en el Estadio Monumental. Pablo Mouche recibió por el sector izquierdo del área, levantó la cabeza, asistió a Esteban Paredes que apareció y mandó el balón al fondo de las redes para hacer estallar La Ruca. Colo Colo ganaba y el ídolo albo alcanzaba el récord ante el archirrival. Finalmente, tras el empate de Ángelo Henríquez y un gol de Julio Barroso en el último minuto, los dirigidos por Mario Salas ganaron por 3 a 2.

Uno que pasó a la historia, además de Esteban Paredes, fue el asistidor. Pablo Mouche entró en el marco final de la fotografía como aquel jugador clave para el gol histórico del artillero del Eterno Campeón. Y es, precisamente, el actual jugador de Barracas Central, el que recordó aquella jornada.

“Sabíamos el partido que nos jugábamos, no solamente por el clásico, sino que también por lo especial que iba a vivir el Tanque, por el récord, porque era un día muy especial para él. Si se daba el récord en ese día, sabíamos que iba a quedar para la historia”, comenzó explicando en conversación con Dale Albo AM.

Sobre la presión que tenía dicho equipo y el jugador por convertir aquel anhelado tanto, el atacante trasandino aclaró que “no tanto la ansiedad y nervios de nosotros, sino que los de él, que sabíamos era muy grande. Presión no porque él estaba acostumbrado, era un tipo que jugaba con presión, que jugaba constantemente, porque era capitán de Colo Colo, ídolo, goleador, esa clase de tipos tienen presión todos los partidos”.

Por último, Mouche añadió que “lo disfruté muchísimo, primero jugar con él al lado, jugar con el Mago por segunda vez en mi carrera. Para mí, compartir con esa clase de jugadores es único, lo disfruté muchísimo. La verdad que fue tremendo, lo disfruté muchísimo y hasta el día de hoy tengo esos recuerdos”.