El fútbol chileno volvió a vivir un triste episodio de violencia en los estadios. Esta vez, en partido válido por la vuelta de los cuartos de final de Copa Chile, Universidad Católica y Universidad de Chile solo pudieron disputar 4 minutos del compromiso. Esto, porque desde la barra de Los Cruzados, fue lanzado un fuego de artificio que impactó al arquero azul Martín Parra.

El encuentro fue suspendido y las alarmas se prendieron en todos los actores del balompié criollo, movilizándose todos los dirigentes para dirimir qué pasará con lo que resta del encuentro y las posibles sanciones que impartirán. Sin embargo, todavía faltaba una voz y era la del Sindicado de Futbolistas Profesionales. Así, su presidente Gamadiel García tuvo palabras para los vergonzosos hechos acontecidos en el Elías Figueroa e hizo un claro llamado a los mandamases de los clubes y a la propia ANFP.

“Es un tema que, lamentablemente, estamos viviendo a diario en cada uno de los estadios de nuestro fútbol, se ha repetido en varios escenarios distintos y es de larga data. Por lo tanto, yo creo que aquí como bien se señalaba ayer, hay que ponerle un punto final”, comenzó su alocución con los Secos del VAR de Radio USACH.

Los presidentes de los equipos son los que no quieren poner sanciones ejemplificadoras, no quieren poner reglas claras, porque son los afectados directamente. Cuando pasan estas cosas que son graves y los mismos presidentes empiezan a dar excusas públicas, ahí nacen todos los problemas”, complementó el presidente del gremio de futbolistas.

Pero no quedó ahí. Es que, como ente que resguarda los intereses de los futbolistas de nuestro país, exigen garantías de seguridad a la ANFP y ser parte de la mesa de trabajo que se entablará para intentar dar una solución a estos temas. Además, afirmó que, si la respuesta desde Quilín no es satisfactoria, no se descarta una paralización de actividades.

“La cosa no ha cambiado. ¿Cuál es la única acción que provoca un remezón? Es la paralización de actividades en que se termina un torneo. Ya ocurrió y no pasó nada, no hay mayor organización. ¿Qué más podemos hacer? Nosotros ya actuamos, son los dirigentes los que realmente tienen que ponerle un punto final a esto”, señaló.

Finalmente, sobre el paro de futbolistas, comentó que dependerá “de los capitanes y delegados de cada club, pero está dentro de las acciones que podemos tomar para proteger la integridad de nuestros asociados”.

 

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Tras el hecho que tuvo lugar en el Elías Figueroa de Valparaíso, en el Cacique comienzan a tomar nota. Esto, porque son 40 mil los espectadores que llegarán al partido ante Universidad Católica y que puede definir el título del Campeonato Nacional.

Así, la dirigencia del Eterno Campeón ya trabaja en un plan de contingencia para redoblar medidas de seguridad y que no tengamos que lamentar hechos como los ocurridos en la Copa Chile o, incluso, en el concierto de Daddy Yankee, donde todo colapsó.