Juan Castillo: Sólo se le puede atribuir algo de responsabilidad en el tercer gol pero queda eximido por la tontera de Scotti. En el resto se vio indefenso ante una defensa que no lo ayudó en nada.
Álvaro Ormeño: Muy, pero muy lejos del futbolista que se comía la banda en Gimnasia. Los seis meses parado le pasaron la cuenta, nunca ha podido dar en el tono y siempre se vio sobrepasado por un Felipe Gutiérrez que hizo lo que quiso por su flanco. Pudo ser expulsado.
Andrés Scotti: Lo puso Ivo Basay para contener a un jugador muy discreto en técnica como César Carignano y tras rechazar tres cabezazos, vino el descalabro. Comenzó a salir a destiempo y coronó con un regalo a Felipe Gutiérrez que fue la lápida. Uno espera que un jugador de su experiencia, al menos, no ayude al rival.
Christian Vilches: De lo mejorcito atrás aunque tampoco nada para evitar el descalabro. Como prácticamente todos los que han pasado en el último tiempo por Colo Colo, se ha contagiado de la imprecisión que no tenía en Audax. Además tampoco puede ir a cubrir a los laterales a cada rato.
Manuel Bravo: No pudo con la presión. Ya se había visto sobrepasado y frustrado en Serena. Hoy lo mismo. Pero el error no es suyo, sino de quien lo manda “a los leones” tras una goleada dura. Fernando Meneses se aburrió de sobrepasarlo. Está recién empezando y no se le puede cargar la mano a él.
Luis Pavez: No es 6 para Colo Colo. Lento en los desplazamientos, no marca, no quita y cuando pega, pega mal. Ya ha tenido muchas opciones.
Rodrigo Millar: Lento en el traslado de la pelota, no ha podido dar salida clara ni tampoco puede pisar el área rival. Terminó expulsado.
José Pedro Fuenzalida: Al menos pone algo de entrega. Corre, pero desordenado. Mucho no podía hacer tampoco.
Esteban Paredes: El capitán tiene sangre y fútbol, pero no las puede hacer todas. Llega a conmover lo que trata de hacer por él y por sus compañeros.
Mauro Olivi: Perdido, totalmente extraviado. Para qué estamos con cosas, es otro el Pampa que llegó a Colo Colo al que se ha visto tras su escándalo personal. Lamentable y ojalá retome el juego pronto.
Carlos Muñoz: No le llegó ni media pelota con ventaja y se veía frustrado. A un delantero cuando no es alimentado es muy difícil realizarle un juicio. Convirtió un gol legítimo que fue anulado pero con el partido ya cerrado.
CAMBIOS
Luis Mena: No se entiende por qué salió él si el problema en Serena fueron los laterales. Algo ordenó y pegó cuando trataron de cancherear. No es menos que Scotti en ningún caso y, por lo menos, sabe dónde está parado.
Boris Rieloff: Partido muy ingrato porque deben haber sido sus mejores minutos en Colo Colo. Distribuyó con criterio arriba, tiró un par de centros peligrosos y combinó bien. También bajó a defender. Debe ser titular en desmedro de Ormeño en el próximo encuentro.
Patricio Jerez: Si bien nunca ha tenido un partido consagratorio, tiene más experiencia y se notó. Meneses no hizo lo que quiso cuando ingresó y hasta tiró un par de interesantes jugadas. De todas formas, no podíamos esperar que la solución viniera por los suyo.
DT
Ivo Basay: Se equivocó el Hueso. Envió a los mismos laterales que fueron sobrepasados una y mil veces en Serena y pasó lo mismo. En su defensa quizás hay que decir que los volantes de contención no ayudaron en nada y no entregaron a un solo futbolista “blandito”, pasaban todos enteros. Fuenzalida y Olivi tampoco asistieron en labores de recuperación. Si puso a Scotti para marcar sólo a Carignano también es una equivocación. Sin embargo, el descalabro no viene sólo por él ya que el equipo no jugaba a nada con Tocalli, a nada con Cagna, a nada con Gallego y ahora lleva dos goleadas en fila. Hay que dejarlo trabajar ya que, con aciertos y virtudes, también es víctima del círculo vicioso de cambiar técnicos cada cinco meses. Sus declaraciones hacen pensar en muchos cambios para la próxima semana.